En fotografía, como en cualquier otro arte, no debe haber reglas de obligado cumplimiento. Sin embargo, cuando hablamos de la composición solemos abordar varios principios que todos conocemos en mayor o menor medida, y que parecen indicarnos qué camino tenemos que recorrer. Pero no es así. Conocer las leyes básicas de composición es el mejor recurso al que podemos recurrir para transgredirlas y evolucionar.
La composición en fotografía es muy importante porque nos ayuda a despertar el interés y a atrapar la atención de aquellas personas que admiran nuestras instantáneas. Y pocos movimientos han enriquecido tanto nuestra comprensión de la percepción como la escuela alemana Gestalt. Sus investigadores establecieron a comienzos del siglo XX un conjunto de principios que resultan de una enorme utilidad para dominar la composición en fotografía. Veamos qué es lo que nos dicen.
1. El principio del sujeto principal
Los investigadores de la escuela Gestalt demostraron de forma científica que nuestra atención se concentra sobre uno o varios elementos, y no en toda la imagen. Esta es la razón por la que recursos como el bokeh son interesantes: nos ayudan a desviar la atención del espectador hacia el motivo de nuestra fotografía que queremos destacar.
2. El principio de concisión
Las formas más simples son las que se muestran con mayor coherencia ante nuestro proceso perceptivo. Este mecanismo nos invita a reducir las ambigüedades y las distracciones recurriendo, en la medida de lo posible, a formas sencillas que tengan significado y coherencia por sí mismas y sin necesidad de apoyarse en otros recursos.
3. El principio de semejanza
Nuestra percepción nos invita a asociar aquellos objetos que tienen unas características visuales comunes, bien sea por su color, forma, textura, tamaño o cualquier otra cualidad. Si en una fotografía varios motivos coinciden en una o varias de estas características, los percibiremos como una única entidad.
4. El principio de simetría
Cuando vemos en una fotografía un objeto y su reflejo simétrico los solemos percibir como un único elemento. Visualmente este principio nos ofrece muchas posibilidades creativas, sobre todo al «jugar» con objetos que reflejan la luz y crean imágenes simétricas, como espejos o masas de agua (estanques, lagos, etc.).
5. El principio de cierre
Si en nuestras fotografías aparecen objetos o formas inacabados, nuestro cerebro los completará y los percibiremos como si realmente estuviesen completos. Es un principio que merece la pena conocer porque puede desviar sensiblemente la manera en que son percibidas nuestras instantáneas.
6. El principio de proximidad
La cercanía entre dos o más objetos crea un vínculo visual entre ellos muy potente. Esto se debe a que nuestro cerebro tiende a organizarlos en función de la distancia que los separa.
7. El principio de experiencia
Todos percibimos e interpretamos las imágenes recurriendo a la experiencia que hemos acumulado hasta ese momento. Por esta razón, una misma fotografía puede ser interpretada, y de hecho suele serlo, de forma muy diferente por dos personas que han tenido experiencias distintas.
8. El principio de continuidad
Nuestro cerebro tiende a agrupar de forma automática aquellos elementos que componen un mismo mensaje visual o modelo frente al resto. Si en una fotografía aparecen cinco objetos, y dos de ellos tienen una cualidad en común que los diferencia de los demás, como, por ejemplo, la forma en que ha actuado sobre ellos el paso del tiempo, los percibiremos como un todo.
Fotografía: Kool Cats Photography
9. El principio del movimiento común
En una imagen percibimos como una unidad todos los objetos que, al menos en apariencia, se desplazan en un mismo sentido y a una velocidad similar.
Sujeto principal y concisión: fundamentales
Como os decía al principio del post, todos estos preceptos nos ayudan a entender cómo interpreta nuestro cerebro lo que vemos. Por esta razón, podemos utilizarlos para definir con más precisión la forma en que queremos que sean percibidas nuestras fotografías. En cualquier caso, los más importantes, y probablemente los más conocidos, son los dos primeros: los principios de sujeto principal y concisión.
Aun así, recordad lo que hemos visto en este y en tantos otros posts: desde un punto de vista creativo nos interesa conocer las reglas, pero no debemos permitir que nos aten y nos impidan experimentar. Con frecuencia para tener éxito es necesario transgredir y «jugar». Y la fotografía no es ajena a esta idea.
Imagen principal | Ibrahim El-Husseini
En Xataka Foto | Estos son los nueve elementos básicos que pueden dar significado a tus fotografías
Ver 5 comentarios