El cine nace de la fotografía; de buscar “el momento justo” 24 veces por segundo. Es claro que el cine toma de la técnica fotográfica muchos elementos para evolucionar y desarrollar él mismo sus propios. Pero los fotógrafos también han aprendido a encontrar valor en aquellos elementos de estilo que el cine propone y que la fotografía puede aprovechar para su narrativa.
Como mencionamos hace un tiempo, en el mundo de la fotografía artística se ha incorporado el sentimiento y la influencia cinematográfica con fotógrafos como Gregory Crewdson y Erwin Olaf. En un sentido de producción a gran escala cuya única toma nos cuenta verdaderas historias de más de mil palabras.
Otros fotógrafos han adoptado del cine algo más estilístico, como lo han hecho fotógrafos como Liam Wong y Watashi Makui. Estos fotógrafos parten desde la fotografía urbana y a través del color nos rodean del sentimiento cinematográfico.
Por ello, para aquellos amantes de la fotografía que quieren darle un estilo más ‘cinematográfico’ a sus imágenes, traemos estos tips para crear un ‘look’ más cine en sus tomas. Espero os sean de mucha utilidad.
A lo largo
El formato es algo particular del mundo del cine. Hasta antes de los smartphones la costumbre siempre fue ver los videos y las películas en formato horizontal. Pero nada hace pensar en cine como los formatos más panorámicos de este arte. Así que para ello los formatos como el 1,37 (11:8), 1,77 (16:9) y 2,35 (21:9).
Al utilizar relaciones de aspecto como estas, inmediatamente la sensación comienza a alejarse de la fotografía convencional, que suele utilizar los formatos 1:1, 2:3 y 3:4 principalmente. Y, si queréis enfatizar aún más el uso del formato, podéis agregar barras negras en la parte superior e inferior de la toma.
Este uso del formato panorámico y cinemascope pueden acentuar mucho las tomas de paisaje, haciendo lucir los espacios mucho más amplios. En retrato y fotografía urbana ayuda a enfatizar sobre la relación del sujeto y el espacio, así como puede ser un formato muy potente para enfocarse en elementos como los ojos.
Suavidad
Uno de los códigos que la gente suele asociar en el cine es la suavidad de la imagen, a diferencia de la fotografía en donde se suele buscar mucha sensación de nitidez y textura. El cine suele sentirse un poco más ‘suave’ o desenfocado porque al grabarse las imágenes tienen desenfoque de movimiento. Por eso en fotografía se suele exagerar este desenfoque para enfatizar el movimiento de un objeto.
Esta sensación de suavidad se puede buscar desde el tipo de lentes que se utilizan (ópticas de poca resolución), obturando al límite de la velocidad óptima de obturación o incluso bajando el nivel de claridad en post producción. Que la iluminación también sea un tanto difusa ayuda a generar el efecto.
El revelado
La hora de revelar las fotografías es el espacio para darle el toque final a que la fotografía parezca un cuadro de una película. Aunque esto tiene que partir también de la visión creativa del fotógrafo, hay códigos que se pueden aprovechar de la forma en que vemos cine para acentuar la sensación cinematográfica.
El primero de ellos es que al ver una película en el cine estamos viendo luces proyectadas sobre una pantalla reflectante. La luz rebotada lava el nivel de negro, así que nunca vemos un negro puro, tampoco vemos un blanco estallado porque el ojo se adapta a la iluminación de la pantalla. Así que una clave para jugar es utilizar el panel de curvas del revelador o de Photoshop, levantando el nivel de base de negros podéis lavar la imagen un poco y luego bajar el nivel de blanco hasta que consigáis un tono gris claro.
También nos encontraremos con el color. Es la parte más subjetiva de todas, pero al igual que los códigos de color tendemos a encontrar patrones. Un tono más cálido y sepia sobre la imagen nos dará una sensación más de recuerdo y añejo. Mientras que un tono más verde y ácido nos puede hacer sentir como en un espacio futurista o deprimente. Otros métodos de dar con tonos más cinematográficos es el uso de LUTs en Photoshop. Podéis ver nuestra nota sobre cómo usar LUTs para guiaros en el proceso.
Si queréis agregar más efecto en la toma, podéis añadir una textura de grano en Photoshop o mediante el revelador. Esto se basa en el código de ver películas en la pantalla grande, donde la ampliación de la imagen (en la época de las películas en película) nos hacía notar el grano más de lo que uno nota en una fotografía de esa misma época.
Referencias
Finalmente, una de las sugerencias principales es que coleccionéis planos de películas. No solo ver las películas, sino agarrar cuadros y analizarlos en luz, color y textura. Eso os ayudará a emular más el estilo cinematográfico en vuestras fotografías.
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