Dedicarse a la fotografía implica casi de forma inmediata hablar de una forma de ver las cosas, un estilo. El estilo podría definirse como una amalgama de elementos que repetimos de forma inconsciente por gusto personal y que define a la postre el resultado de nuestros trabajos. Hoy desgranaremos la importancia de tener fotógrafos referentes, aprender de ellos y depurar nuestro estilo fotográfico.
Conocimiento técnico y conocimiento creativo
Es importante diferenciar entre el conocimiento técnico y el conocimiento creativo. Mientras que el técnico consiste en saber el funcionamiento físico de la cámara y nos permite tomar una fotografía con los parámetros correctos más rápido, el conocimiento creativo se basa en la construcción de una base visual y en una serie de recursos creativos con los que llenamos el contenido del cuadro. No es raro, por tanto, que a un novato no le hagamos preocuparse por lo que fotografía sino por que la foto salga correctamente expuesta sin parámetros extraños, como un ISO inusualmente alto si podemos ralentizar la velocidad o abrir diafragma.

Para conseguir el conocimiento técnico de la cámara podemos recurrir a cursos presenciales, libros o lectura en internet, pero saber cómo posicionar los elementos en el visor es algo más complicado que puede llevar a confusión. Si tenemos pretensiones serias con la fotografía, no podemos esperar hacer las cosas 'porque me gustan', todo debe tener su razón de ser y la fotografía de todas las disciplinas se retroalimenta de autores anteriores. Normalmente, observar el trabajo de los fotógrafos clásicos e ir recorriendo las diferentes referencias de la disciplina fotográfica que nos interese será el mejor ejercicio creativo que podamos realizar para seguir mejorando.
El experimento de la imitación
Una forma muy interesante de poner en práctica lo que vemos es hacer un experimento de imitación realizando fotografías que imiten piezas de autores clásicos. Como cada autor tiene una forma de trabajar el color, los encuadres o las poses de la modelo, e intentar deconstruir esas pequeñas partes nos ayuda a aprender el por qué de las cosas y cómo funcionan en sincronía. La filosofía es parecida a la que empleamos con Photoshop: seguimos tutoriales para aprender un resultado final, pero por el camino encontramos herramientas nuevas que nos ayudan en nuestras propias imágenes.

Por ejemplo, podemos coger cualquiera de las fotografías de Richard Avedon e intentar imitar la luz y las poses, o ir a realizar senderismo e intentar conseguir un contraste al que conseguía Ansel Adams en sus fotografías. Descubriendo nuevos fotógrafos el ojo se afina y es más sensible a los detalles, descubriendo que cada fotógrafo, por ejemplo, trabaja de forma diferente la posición de las manos o el rostro de una modelo.
Y tu, ¿cómo crees que es más efectivo el aprendizaje fotográfico? ¿qué crees que es lo más importante para construir un estilo fotográfico?
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5 comentarios
juanmcm
Yo siempre he creído que en la fotografía como en casi todo la clave está en imitar para buscar tu estilo, partiendo de un ejemplo o un mentor, así como un maestro, alguien que ya sabe como desarrollar esa actividad, por lo que no partiremos de cero.
Luego, vemos como haciendo su labor, poco a poco vamos cogiendo elementos que nos gustan o nos favorecen y desechando aquellos que no nos gustan, que a lo mejor no nos aportan nada y lo que es más importante perfeccionando tanto nuestro estilo como la labor que desarrollamos.
En fotografía he ido viendo a muchos paisajistas (por los colores), otros documentalistas y reporteros gráficos (por las situaciones así como la composición de su trabajo y temática comprometida) que si bien la fotografía no es mi labor, voy intentando tomar elementos suyos para poco a poco intentar descubrir el mío, así que no veo mal que se imite a grandes personalidades de la pintura, escultura y fotografía.
travestischat
Yo siempre intento mostrar la parte sensual en mis fotografias, prefiero el erotismo de un cuerpo ligeramente tapado que mostrar un desnudo explicito. Creo que se produce más fantasia y elegancia.