Cómo elegir el trípode y la rótula que mejor se adecuan a cada tipo de fotografía

Cómo elegir el trípode y la rótula que mejor se adecuan a cada tipo de fotografía
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Hace un par de meses uno de mis compañeros en Xataka Foto preparó un post en el que indagó en todo lo que necesitamos saber antes de comprar un trípode para elegir con acierto. Si os interesa este tema, os aconsejo su lectura. Mi objetivo ahora es ampliar la información que os ofrecimos en aquella entrada con varios consejos que pueden ayudarnos a elegir un trípode en función del tipo de fotografía que practicamos.

Pero en esta ocasión me voy a ceñir al que sin duda es uno de los elementos más importantes de un trípode, su rótula, indagando en qué tipo de «articulación» merece la pena considerar en función de nuestras necesidades. Estos consejos proceden de mi experiencia personal, y también de las triquiñuelas de José B. Ruiz, un reputado fotógrafo experto en fotografía de naturaleza.

¿Lo ideal? Una rótula intercambiable

Si somos profesionales o entusiastas exigentes, y practicamos varios tipos de fotografía, lo ideal es que nos hagamos con un trípode de gama alta que nos permita cambiar la rótula. Estos dispositivos de «articulación» intercambiable tienen la ventaja de adaptarse a distintos escenario de captura sin obligarnos a comprar varios trípodes distintos. Pero, a cambio, suelen ser algo más caros que los de rótula fija, al menos en cuanto compramos un par de «articulaciones» distintas, que es lo suyo.

Rótula de trípode

Que nos decantemos por uno de rótula fija o intercambiable debe depender, por supuesto, de nuestro presupuesto, y también de nuestra ambición artística. Hay trípodes de una calidad muy decente por precios que oscilan entre 70 y 100 euros, pero suelen ser de rótula fija. Si podemos gastarnos un poco más, por entre 150 y 200 euros podemos hacernos con un trípode de rótula fija o intercambiable y gama alta que probablemente nos ofrecerá un buen servicio durante mucho tiempo.

Rótula de trípode

Elige la rótula adecuada

  • Rótula de tres ejes. Permite girar la cámara y desplazarla en vertical y horizontal. Es perfecta para fotografiar objetos estáticos y fotografía de paisaje.

  • Rótula de cremallera. Suele adaptarse muy bien a la fotografía macro y con teleobjetivos con distancia focal corta. Es una de mis preferidas por su enorme precisión, pero, a cambio, es bastante pesada. Puede ser reemplazada por una rótula de tres ejes.

  • Rótula de balancín o bola. Son muy útiles si solemos trabajar con teleobjetivos grandes y pesados, y fotografiamos sujetos en movimiento. Nos ofrecen mucha precisión. En algunos escenarios de uso pueden ser reemplazadas por un monopie, aunque este último nos ofrece menos estabilidad.

  • Rótula de joystick. Son similares a las de bola, pero tienen una forma alargada y un gatillo que nos permite desplazar la cámara en los tres ejes a la vez. Son interesantes para fotografía deportiva, y suelen instalarse sobre monopies.

  • Rótula panorámica. Es un tipo especial de rótula diseñada para permitirnos nivelar la cámara de manera que podamos encontrar el centro de perspectiva de nuestro objetivo, y, de esta forma, tomar imágenes sucesivas con precisión. Permiten realizar también fotografías de 360 grados y mosaicos.

En Xataka Foto | Todo lo que necesitas saber antes de comprar un trípode

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