La montura A «tiene cuerda» para rato. Al menos esto es lo que opinan en Sony. Como recordaréis, durante la celebración de la edición de sus premios de fotografía del año pasado la compañía japonesa dio a conocer la A77 II, su última cámara con montura de tipo A y espejo translúcido. Y en la edición de los Sony World Photography Awards que se clausuró ayer mismo han presentado dos nuevas ópticas de Zeiss para esta montura que, sobre el papel, pintan realmente bien.
Uno de estos objetivos es el Vario-Sonnar T* 24-70 mm f/2.8 ZA SSM II, y el otro el Vario-Sonnar T* 16-35 mm f/2.8 ZA SSM II. Ambas ópticas tienen zoom, como podéis ver, una arquitectura bastante compleja, y, en teoría, una calidad óptica de «primera división». Sin duda, los usuarios de las cámaras con montura A van a encontrar en estos objetivos unos aliados muy interesantes. Por supuesto, utilizando un adaptador también pueden convivir con cámaras con montura E, como las de la familia A7 de Sony. Echémosles un vistazo con más profundidad.
Vario-Sonnar T* 24-70 mm f/2.8 ZA SSM II
Como os he adelantado, la arquitectura óptica de este objetivo es compleja. De hecho, utiliza 17 elementos organizados en 13 grupos. Dos de ellos son lentes asféricas y otros dos lentes de muy baja dispersión. El diafragma es un diseño de 9 hojas, y tiene un diámetro efectivo para los filtros de 77 mm. Por supuesto, como cabe esperar, es totalmente compatible con los cuerpos estabilizados de Sony.
Más datos de interés. Enfoca a una distancia mínima de 34 cm, tiene un factor de ampliación máximo de 0,25x, mide 83 x 111 mm y pesa 974 g. Desafortunadamente, en la presentación de estos objetivos que ha tenido lugar en Londres hace unas horas no pudimos probarlos, pero pude examinarlos muy de cerca con cierta calma, y puedo aseguraros que su construcción es fantástica, como cabe esperar de una óptica de este nivel firmada por Zeiss.
Vario-Sonnar T* 16-35 mm f/2.8 ZA SSM II
Como podéis ver, el segundo objetivo también se mueve en un rango de focales muy interesante. Su arquitectura óptica tiene una complejidad equiparable a la del 24-70 mm, de hecho, al igual que este último, utiliza 17 elementos organizados en 13 grupos. Algo importante que merece la pena que tengamos en cuenta es que las lentes de ambos objetivos incorporan una nueva cobertura que las protege de la humedad y el polvo, y también tienen un motor de enfoque con un rendimiento mejorado que les permite mantener el enfoque automático continuo a una velocidad cuatro veces mayor que la que nos ofrecen las anteriores versiones de estas ópticas.
A diferencia del 24-70 mm, este objetivo recurre a tres lentes asféricas, una de muy baja dispersión y otra de dispersión extremadamente reducida. Por lo demás, el 16-35 mm es similar al 24-70 mm: también incorpora un diafragma de 9 hojas, enfoca a una distancia mínima de 28 cm, tiene un diámetro efectivo para los filtros de 77 mm y un factor de ampliación máximo de 0,24x. Por último, mide 83 x 114 mm y pesa 872 g.
Precio y disponibilidad
Sony ha confirmado que ambas ópticas estarán disponibles en junio a un precio de 2.100 dólares (unos 1.932 euros al cambio directo) el Vario-Sonnar T* 24-70 mm f/2.8 ZA SSM II, y 2.250 dólares (unos 2.070 euros al cambio directo) el Vario-Sonnar T* 16-35 mm f/2.8 ZA SSM II. No son ninguna ganga, pero ya sabemos que las ópticas de este nivel que fabrica Zeiss suelen ser caras, y estas no son una excepción.
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