Saal Digital está haciendo una campaña en las redes sociales muy llamativa. Buscan a fotógrafos que quieran imprimir sus trabajos y les ofrecen descuentos muy llamativos. En Xataka Foto hemos probado el álbum Saal de gama profesional y vamos a contar cómo ha sido todo el proceso, desde su preparación hasta su entrega. Y valoraremos sobre todo su aspecto para contaros si es una empresa para tener en cuenta para nuestras fotografías.
Imprimir las fotografías debería ser el destino final. Colgadas en la pared, en un libro o en un álbum. Es la mejor forma de apreciar correctamente el resultado de nuestro trabajo. Ver las fotografías en las pantallas no tiene nada que ver con la sensación de poder tocarlas. Pero conseguir buenos resultados es muy difícil.
El mejor resultado será siempre trabajar con un laboratorio de confianza. Con un laboratorio de esos que te reciben y miran las fotografías en sus monitores calibrados y te garantizan que el color será exacto cuando las impriman con perfiles amplios y personalizados para sus impresoras. Pero muchas veces no es posible, o no tenemos tiempo o no tenemos problema alguno en que la impresión no consiga exactamente los mismos colores que hemos visto en la pantalla de nuestro portátil.
Para estos casos tenemos la posibilidad de trabajar con distintos laboratorios online que nos prometen buenos resultados. Nos facilitan un programa en el que podemos editar nuestros disparos bien a mano o con plantillas personalizadas y solo tenemos que enviarlo para recibir al cabo del tiempo nuestro álbum o fotografías.
Este es el caso de Saal Digital, una empresa que ofrece sus servicios online para impresión de copias y para la creación de álbumes con distintos acabados y tamaños.
Los álbumes digitales
Llevo bastantes años en esta profesión. He hecho muchos proyectos, bastantes bodas y sobre todo he ayudado a hacer una gran cantidad de álbumes a mis alumnos de toda clase y condición. Desde una sencilla revista a libros de gran formato. Para trabajos de escuela o como recuerdos de viajes.
Así que he podido trabajar con muchas de las empresas que hay en el mercado digital. Siempre me he encontrado con los mismos problemas en cualquiera de ellos. Y por este motivo son precisamente las cosas en las que más me he fijado a la hora de analizar el álbum digital de Saal Digital:
- Funcionamiento del programa original de maquetación.
- Integración con los programas habituales de fotografía y maquetación.
- Gestión del color.
- Tiempo de entrega y calidad de los acabados.
En concreto he trabajado con el álbum profesional de 30 x 30cm, con 26 páginas interiores en papel fotográfico y con la caja premium de lino natural con símil de piel blanco y con la tapa frontal de metacrilato con símil piel en negro. Así que vamos a ponernos manos a la obra y vamos a ver todos los puntos que he señalado.
Funcionamiento del programa original de Saal
El programa de Saal Digital se llama Saal Design y está preparado para Windows y Mac. Siempre he tenido miedo a este tipo de software. Se bloquean con mucha carga de trabajo, otras no funcionan determinadas herramientas... Sucede con los programas más populares del mercado, incluido el omnipresente Blurb que tan integrado está con los programas de Adobe.
Con el programa que hemos estado probando te puedes perder con todos los productos que ofrecen, desde copias en papel a tarjetas, cuadros o calendarios. Afortunadamente todo está claro y es fácil encontrar lo que quieres conseguir. En esta ocasión me centraré en la creación y maquetación de álbumes profesionales.
La interfaz del programa está muy conseguida. Todo está al alcance de la mano, salvo una cosa... Quizás es la edad pero siempre me ha costado encontrar el pequeño icono Proyectos para encontrar el álbum que estaba realizando.
Una vez dentro viene muy bien consultar los tutoriales para saber cómo funciona el programa. Pero si estás ducho en el manejo de este tipo de software enseguida te haces con él. Puedes utilizar plantillas si quieres hacer la maquetación rápidamente o diseñarlo tú solo desde el principio. Esto es un gran punto a su favor.
Lo único malo es que los archivos que puedes cargar solo pueden ser jpeg. Nada de TIFF. Me imagino que será por agilizar su funcionamiento, pero no es una buena noticia si buscas la máxima calidad. Como veréis más adelante, esto se puede solucionar.
Una vez cargados tienes todas las miniaturas en la parte inferior de la pantalla y solo tienes que arrastrar y soltar. Y una vez colocadas en la página elegida, tienes todas las opciones que quieras. Desde ajustar a sangre a ajustar una ventana en cualquier punto de la misma. la libertad es total.
Evidentemente no estamos ante Indesign pero podemos conseguir todo lo que nos propongamos con relativa facilidad. Y en ningún momento se ha bloqueado, al menos durante el tiempo en el que he estado trabajando con él. Y he quitado y puesto muchas fotografías, cambiado de tamaño, de tipografías, etc...
Integración con los programas habituales de fotografía y maquetación
Y aquí llega una de las buenas noticias de Saal Digital. Tenemos la posibilidad de servirnos de una extensión para Adobe Photoshop y Adobe InDesign para tener en el programa todas las plantillas para utilizarlas como base para la maquetación. Y esta es la forma de poder trabajar con los archivos en formato TIFF.
Es muy cómodo no tener que salir de nuestro programa y poder hacer todos los ajustes que veamos que necesita la fotografía a la hora de maquetar. Igualar colores, eliminar algo que no queramos, oscurecer un cielo... Las posibilidades son infinitas. Y no es tan difícil hacerlo.
Y si solo tenemos Adobe Lightroom existe la posibilidad de vincular la aplicación de Saal Digital con dicho programa. Si queremos revelar la imagen la podemos abrir en dicho programa desde Saal Design.
No es lo mismo que el tener el módulo Libro para Blurb pero se acerca bastante. Y de nuevo será para agilizar la automatización, pero es una pena que no podamos elegir el formato que nosotros queramos y nos tengamos que ceñir a sus formatos.
Gestión del color
Este es uno de los temas que más me preocupaba a la hora de utilizar los servicios de esta empresa. Es algo que normalmente no preocupa al usuario medio hasta que se da cuenta de que las fotografías son más oscuras, más claras o más saturadas de lo que había visto en su pantalla.
para evitar problemas hay que preparar las fotografías que van a formar parte del álbum en sRGB
Para los profesionales o usuarios avanzados es fundamental tener la seguridad de que los colores que ha buscado en el revelado son los que verá en el papel o en el álbum que va a recibir. De entrada, para evitar problemas hay que preparar las fotografías que van a formar parte del álbum en sRGB. Es lo más importante para conseguir los mejores resultados.
Para conseguir satisfacer a los más exigentes en lo que respecta a la gestión del color, desde la página de Saal Digital podemos encontrar los imprescindibles perfiles ICC para contemplar, en nuestro monitor correctamente perfilado, cómo se verán las fotografías. Y recomiendan los siguientes ajustes:
- Luminosidad: 90 - 120 candelas por metro cuadrado
- Temperatura de color: 5.000 Kelvin (D50)
- Valor de gamma: 2,2
Y encontramos información práctica para configurar sin problemas, una serie de consejos para aplicar correctamente los perfiles ICC de todos los productos. Así podemos saber si tenemos que activar la Compensación del punto negro o no; o cuál es el Propósito o Interpretación necesaria para cada tipo de producto.
Los resultados hablan por sí solos. Para la prueba he seleccionado las fotografías más difíciles que he encontrado en mi archivo. bien por exceso de saturación, por los tonos de la imagen e incluso en blanco y negro. En este caso he apostado por virados al platino muy suaves que he podido apreciar en las copias del álbum.
La opinión de Xataka Foto
Desde que envié el álbum hasta que lo he recibido en mi casa en apenas una semana. Un paquete grande, acorde con las dimensiones del encargo. Bien protegido con cartones que evitar cualquier daño por una mala manipulación.
El álbum profesional me ha llamado la atención por sus acabados. En una caja de lino aparece el álbum con la portada protegida por metacrilato (ojo, este archivo hay que ponerlo a 600 ppp). Lo sacas y, aunque solo tiene 26 páginas, el peso hace acto de presencia. Es un objeto pesado. Ideal para presentar a los novios pero nunca para moverlo de un lado a otro para enseñarlo como un porfolio.
Las hojas son rígidas y duras. Es un álbum, no un libro. Y se agradece mucho el tacto del papel brillante en el que, de momento, no he dejado huella alguna y la posibilidad de que se pueda abrir a 180º. Es imprescindible verlo apoyado en una mesa o en un cómodo atril.
Y lo más importante, la calidad de reproducción de las fotografías. El color es bastante bueno. Y eso a pesar de las complicaciones que he buscado para la prueba. Es una reproducción fiel. Los matices de los rojos están ahí presentes y los virados al platino se pueden ver sin imaginárselos.
Si tienes el ojo entrenado serás capaz de distinguir la procedencia de los archivos. Los resultados no serán los mismos. Estamos hablando de fotografías impresas en un formato grande. Y no se ve igual una imagen de una Canon EOS 300D o de una Sony A7 III. Las diferencias de las cámaras son mucho más evidentes en el momento en el que imprimes la copia.
Para terminar. Es un producto muy recomendable. A muchos el precio final de este producto les puede resultar excesivo, a pesar de los continuos descuentos que podemos encontrar en la web. Y siempre podemos buscar otras opciones de acabado dentro de su página. Ahora todo depende de nosotros y de lo que queramos hacer con nuestras fotografías. Seguro que nadie las va a ver si solo están dentro del disco duro.
Sitio web Si eres fotógrafo amateur o profesional, quizás te interese esto
Ver 1 comentarios