No sé si son problema o solución, pero están ahí. A raíz de la conversación con un buen amigo me he planteado realizar esta humilde reflexión. Instagram, Facebook, Twitter se convierten en numerosas ocasiones en escaparates para mostrar cualquier fotografía. Está en la filosofía con la que nació Internet. Casi todo el mundo tiene acceso, casi todo el mundo Por otro lado, las redes sociales delatan la falta de criterio y el ego de muchos "nuevos fotógrafos" que piensan que la retroalimentación del "me gusta" de los más cercanos les convierte en referentes para el resto del mundo.
Sin embargo, las redes sociales se convierten en un problema cuando éstas comienzan a ser nuestro referente fotográfico. Mejor dicho cuando seguimos a quien no debemos, fruto de nuestra pobre cultura visual y/o fotográfica. Por eso, en Xataka Foto tratamos siempre de mostrar alternativas a lo que podemos ver en las redes sociales con series como las de "Grandes Maestros de la Fotografía" o nuestras Entrevistas donde jóvenes valores y otros más consagrados comparten espacio, las exposiciones o nuestra sección de "Fotógrafos". No siempre lo conseguimos, pero valorad nuestro esfuerzo y entusiasmo por mostraros una cara de la fotografía que, en ocasiones, parece interesar menos.
Es importante estar, pero no de cualquier manera
La mayor parte de la gente comparte sus fotografías como un modo de reflejar parte de su vida en las redes sociales. Eso es muy bueno. Sin embargo, hay muchos aficionados a la fotografía y profesionales que parecen no entender que si quieren aportar un valor diferente en las redes sociales, han de hacerlo con criterio. Ver como la cantidad supera ampliamente la calidad de muchos portafolios es la tónica habitual.
Un criterio que, repito, debe ser fruto de su propia cultura fotográfica. Muy pobre en demasiadas ocasiones. Pelearse por tres comentarios más o menos, concursos semanales y otros galardones sociales resulta ser un círculo incompleto donde los halagos al fotógrafo se convierten en su peor enemigo.
Unos halagos que retroalimentan falsamente nuestro propio ego - algo que parece que tenemos muy desarrollado los fotógrafos, por cierto - y nos hacen pensar que somos mejores de lo que realmente somos. Es caer en lo que se conoce como profecía autocumplida o autorrealizada, una predicción que, una vez hecha, es en sí misma la causa de que se haga realidad.
Compartir con humildad el trabajo propio
Pero no todo son actitudes negativas. Mejor dicho, solo miran hacia el propio ego. Por supuesto que existen fotógrafos que desde su pequeño rincón del mundo virtual comparten con humildad sus trabajos sin esperar o preocuparse por la "estupenda" aceptación de las redes sociales. Algo que podemos ver en también muchos otros casos.
Ejemplos que promueven la sinceridad y se atreven a decir y contar con sus imágenes cuestiones diferentes. Seguro que tenéis ejemplos en la cabeza de ello (Scott Kelby, Sebastiao Salgado, Mario Testino, David Airob - al que entrevistábamos hoy -, Mario Sierra o Steve McCurry, por citar unos pocos y con perfiles muy distintos, son algunos fotógrafos bastante activos en las redes sociales). Otros deciden apartarse del mundo de las redes sociales precisamente por lo que hemos comentado en el punto anterior. Perfectamente respetable.
Y es que la sinceridad no es buena compañera muchas veces. Encontrar una crítica sincera, educada y responsable en las redes sociales es como aventurarse a ir a La Isla del Tesoro sin mapa y sin un John Silver que nos cuestiona a cada momento. Necesitamos que nos cuestionen nuestro lenguaje visual. Rodearse de buenos compañeros (de viaje) fotógrafos que te cuestionesn, que te hagan preguntarse a cada paso, que expresen su sinceridad es descubrir ese tesoro. Una sinceridad que nos guardamos muchas veces de comentar en público. Una sinceridad que tiene poca cabida en las redes sociales.
Recuerda que quien tiene amigos sinceros, para lo bueno y lo malo, tiene un verdadero tesoro.
Fotografía de portada | Dorothea Lange, la fotógrafa del pueblo
En Xataka Foto | Opinión | Explore: ¿una adicción a Flickr?
Ver 19 comentarios