Han estado tanto tiempo dándonos la paliza con la famosa TDT que todos estábamos deseando que llegara de una vez el apagón analógico. Y resulta que llega y hay un buen número de poblaciones que se han quedado sin tele y un buen número de ciudadanos, ajenos a esto de la tecnología, que siguen peleándose día a día con los mandos de la tele y el descodificador para conseguir ver el canal que desean sin tener que recurrir a un técnico o llamar a su hijo o nieto para que les asesore, una vez más.
Cuando todavía no hemos asimilado esta nueva tecnología ya nos están vendiendo invadiendo con el 3D, primero en el cine, con la manida excusa de la lucha contra la piratería y ahora ya con la televisión e incluso con la fotografía.
No deberíamos tener nada en contra de los avances tecnológicos mientras que se hagan con algo de cabeza y previsión y sin que resulten ser una imposición para nadie. Volviendo al tema de la TDT, resulta que casi el 2% de la población española, que dicho así no parece mucho pero son cerca de un millón de habitantes, no ven la TDT, ni ninguna otra televisión que no sea de pago, porque ya es la única que hay, y otro porcentaje mucho más alto la ve con bastantes problemas. Aunque queda la famosa frase consuelo de: “para lo que hay que ver…”.
Y ahora llega el 3D de forma masiva al cine y la televisión, y nos lo venden como la panacea visual del futuro. Lo cierto es que es un tema interesante y que seguro que es un chulada cuando lo puedes ver, pero como resulta que yo soy casi tuerto, los efectos 3D y sus gafas sólo me sirven para ver las cosas emborronadas. Investigando un poco por ahí esto del 3D puede ser peor todavía que lo del TDT, porque resulta que entre un 20 y un 30% de la población tiene dificultades reales para apreciar los beneficios del 3D e incluso en muchos casos les provoca molestias de visión.
Hablando de fotografía, que para eso estamos en un blog de fotografía, primero nos metieron megapíxeles con calzador y sin opción de decir que no; luego ha venido el vídeo, menos mal que esto es una opción que el que quiere la usa y el que no, no. Y ahora empieza a llegar el 3D a la fotografía y lo que me preocupa realmente es que todos los fabricantes se vuelvan locos y saquen sólo cámaras en 3D aprovechando el tirón y se olviden de nosotros los pobres tuertos.
Ya hemos visto los primeros modelos de cámara 3d y también los primeros objetivos adaptados para cámaras convencionales y es seguro que en los próximos meses tendremos muchas más noticias al respecto, quizás hasta que algún fabricante desarrolle la fotografía holográfica o interactiva, no estaría mal poder interactuar con la foto de según quien, y entonces nos olvidaremos de los megapíxeles, del vídeo y del 3D para inundarlo todo con esa nueva tecnología
Por el momento parece que no hay peligro con este tema pero, al fin y al cabo la fotografía siempre ha sido en dos dimensiones tanto en sus métodos de captura como en su exposición final. Esperemos que no cambie en este aspecto, o al menos que nos den la opción de elegir si queremos foto tradicional en dos dimensiones o pasarnos al 3D, o cualquier otro adelanto que nos presenten.
Si no voy a poder ir al cine, ni ver la tele, ni hacer fotos, sólo me quedará el consuelo de la lectura, a no ser que a alguien se le ocurra también hacer libros en 3D, que espero que no. Aunque tampoco me hagáis mucho caso, que igual esto es solo una pataleta por no poder ver “Avatar” en 3D, que mi hijo dice que está genial.
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