Con la llegada de Black Friday muchos de nosotros debemos estar ahora viendo las mejores ofertas que podemos encontrar para actualizar nuestro equipo fotográfico. Debe haber muchas cámaras, objetivos, accesorios y software que queremos adquirir, pero un límite económico que no nos deja tener todo lo que queremos. ¿Cuál es la mejor ruta de inversión?
Una ruta para el futuro
Con la evolución tecnológica, la fotografía cambia a grandes pasos. Sin embargo, hay elementos que pueden vivir tal cual por generaciones, hay otros que deben ser comprados pensando a futuro y otros que pueden evolucionar durante el camino. Teniendo esto en cuenta debemos pensar cómo puede beneficiar nuestro flujo de trabajo y propósitos con la fotografía.
Si nuestro camino fotográfico va más por hobby y por gustos, lo más probable es que podemos prescindir de necesidades y comprar equipo según nuestros antojos. Sin embargo, para quienes vivimos de la fotografía o aquellos que pensamos en este arte también como profesión, las decisiones deben ser más consecuentes en cómo esa inversión que realizamos beneficia nuestra marca fotográfica.
Así que en orden, uno puede categorizar los elementos en tres categorías principales: necesarios, de calidad y complementos.
Necesarios
En el mundo fotográfico nuestras necesidades son muy básicas. Necesitamos una cámara, un objetivo, memoria, un ordenador y software de revelado o edición. Estos elementos tienen una variedad de características principales.
La cámara: esta es una inversión que se debe tomar pensando a futuro. Las cámaras son costosas, pero una buena cámara puede durar durante muchos años. Hasta este año mi cámara principal fue una Canon EOS 7D que adquirí en 2012. La pregunta de compra acá debe ser, ¿la necesito ya? Si no tenemos cámara o ya tiene muchos años y ya está por morir, podemos pensar en adquirir una cámara. Si nuestra cámara cumple con nuestras necesidades, entonces olvidemos los nuevos megapíxeles y mejor invirtamos en otra necesidad.
Los objetivos: En el pasado os hemos dado guías sobre cómo saber qué objetivos debemos comprar. Las selecciones varían entre el nivel que tenemos, el valor estético de los objetivos y el tipo de fotografía que realizamos. Los objetivos son una inversión que siempre tiene vida profesional. Mientras la montura sea compatible con la de nuestra cámara, los objetivos que usamos seguirán sirviendo en el futuro. Incluso algunos objetivos clásicos llevados a sistemas más modernos resultan en imágenes con cualidades estéticas que complementan las capturas realizadas.
Ordenador y memoria: La memoria es sencilla, debemos comprar al menos una memoria, preferiblemente de buena capacidad y de alta velocidad de transferencia para aprovechar al máximo las funciones de ráfaga de nuestra cámara. El ordenador, por su parte, debemos tener al menos un balance de recomendaciones mínimas para correr cualquier software de revelado y edición. Sin embargo, un mejor ordenador es mejor pues nos hará la vida más fácil. Y cada tiempo que nos ahorramos aplicando efectos, haciendo cambios o simplemente abriendo un programa es tiempo que ganamos para invertir en nuestra vida y nuestro negocio. La ventaja es que estas dos son inversiones que pueden evolucionar con el tiempo. A medida que va pasando el tiempo podemos seguir invirtiendo en aumentar la RAM, en mejorar el almacenamiento o en actualizar el sistema en cuanto a procesador y gráficas.
Software de edición y revelado: Hay varias alternativas gratuitas en el mercado que son muy buenas y que si aprendemos a utilizar no necesitaremos nada más. Sin embargo, aún si es pago, debemos conseguir software. Ya dependerá elegir entre casarse con una familia como Adobe, o en experimentar con familias de licencia como Affinity Photo y Skylum Luminar. Esta época es muy buena ya que podemos conseguir algunas ofertas interesantes de descuentos en anualidades o en licencias perpetuas.
De calidad
Las inversiones de calidad son aquellas que pueden mejorar la calidad de nuestro trabajo. En parte son necesarias ya que nos permiten crecer profesionalmente, pero aún podemos realizar trabajos sin necesidad de ellos.
- Iluminación: Desde un flash de estudio a un flash de cámara, la iluminación es una de nuestras herramientas principales y son una inversión a futuro. Una luz que se cuida y se hace mantenimiento periódicamente puede vivir por décadas. Son muy necesarias en tipos de trabajos como editoriales, moda y producto; y pueden complementar incluso géneros que buscan elementos más naturales como la fotografía documental y de naturaleza. Es importante invertir en iluminación y modificadores si queremos controlar la luz y crear mejores imágenes.
Filtros: Al igual que la iluminación, algunos filtros pueden impulsar más la calidad de nuestras imágenes. Son inversiones que, bien cuidadas, duran por siempre. Un polarizador es una inversión que no solo beneficia al paisaje, también ayuda a mejores pieles en el retrato. Los ND permiten un gran rango de aplicaciones en diferentes géneros. Incluso los filtros de tinte y efectos tienen características estéticas que pueden servir para algún trabajo.
Fondos: Una buena práctica como fotógrafos es tener cuatro fondos básicos (blanco, negro, gris y verde). Con estas cuatro telas tenemos los elementos básicos para fotografías básicas de estudio. Sin embargo, los fondos fotográficos son inversiones que pueden complementar nuestros retratos, nuestros productos, nuestras naturalezas muertas, nuestras fotos de comida y demás. Está claro que no es para todas las especialidades (salvo que uno quiera hacer algún experimento especial). Sin embargo, es una inversión que puede evolucionar con nuevos estilos; y es una inversión que va a ayudar a muchos fotógrafos ahí.
Complementos
Los complementos son aquellos elementos que son interesantes tener, pero que no modificarán mucho nuestro trabajo.
- Presets: Aprovechar las rebajas para conseguir paquetes puede ser una inversión interesante. Los buenos presets pueden ser una gran base de revelado para nuestras imágenes. Sigo siendo partidario de buscar nuestro propio estilo, pero algunos ajustes pueden ser de gran utilidad.
- Accesorios de comodidad o estéticos: ¿Una correa que hace masajes mientras disparamos?¿Un escáner de negativos que funciona retroiluminando el film para que nosotros lo fotografiemos? ¿Una impresora portátil que se conecta con el móvil? Son cosas que están bien por gusto, pero que no aportan en realidad a lo que hacemos. Si sobra el dinero, a por ello, si no, mejor enfoquemos nuestras compras a lo que más nos ayudará.
¿Qué conseguisteis durante las ofertas de Black Friday?