Olympus PEN-F es el nombre de la nueva cámara que la marca japonesa presenta hoy y que pretende elevar el nivel de la gama PEN. Entre sus prestaciones, integra un sensor Micro Cuatro Tercios (1,33") y una Estabilización de Imagen de hasta 5 pasos en un diseño retro en plata y negro. Pretende plantar cara a las DSLR y aunque en especificaciones técnicas la vemos justita, habrá que ver cómo se comporta durante la primera toma de contacto.
Diseño retro para una cámara de alta gama
Si alguien pensaba que el diseño retro es incompatible con una cámara de alta gama, la Olympus PEN-F llega para intentar convencernos de lo contrario. Aunque bien es cierto que el diseño juega un papel importantísimo para los fotógrafos, la PEN-F juega por encima de los 1000 euros y eso implica que por muy bonita que sea, tiene que dar la talla sobradamente para justificar su precio.
Pasando a detallar los aspectos técnicos, en la PEN-F encontraremos un sensor Micro Cuatro Tercios (1,33") sin filtro de paso bajo, acompañado de un sistema de Estabiliación de Imagen de 5 Ejes que compensa hasta 5 pasos. Para el visor electrónico, Olympus apuesta por un OLED de 2,36 millones de píxeles y como prestaciones adicionales encontramos la ráfaga a 10 fotografías por segundo y la inclusión de WiFi para una conectividad total.
En cuanto al diseño, encontramos una construcción en metal y piel sintética y en la nota de prensa no se menciona ni el material del chasis ni si el equipo está sellado al agua y al polvo. Entre los controles, encontramos dos diales simples y dos dobles, además de un dial frontal diseñado para intercambiar los modos creativos.
Si hablamos de precios, el cuerpo costará 1199 euros que escalará hasta los 1399 euros si incluímos un Zuiko Digital ED 14-42mm ƒ/3.5- 5.6 EZ Pancake o los 1499 euros si preferimos optar por un luminoso Zuiko Digital 17mm ƒ/1.8.
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