Parece que los grandes fabricantes de equipos fotográficos se están lanzando a captar a los usuarios que quieren gozar de la excelencia de sus cámaras réflex digitales pero sin que esto signifique llevar muchísimo peso (y dinero) en cristal encima.
Si ayer veíamos que Canon lanzaba junto a la 50D un 18-200 estabilizado, hoy es Nikon quien contraataca presentando el Nikkor AF-S DX 18-105 mm f/3.5-5.6G ED VR junto a la nueva D90.
Este objetivo ha sido concebido para ofrecer un rendimiento óptimo montado en la Nikon D90 y, por su distancia focal, puede ser útil para muchas situaciones fotográficas diferentes, desde la arquitectura a los retratos.
Su sistema de reducción de la vibración (VR) tolera hasta 3 pasos, un paso menos que el objetivo presentado por Canon.
Especificaciones: * Distancia focal :18-105 mm18-105 mm. * Apertura máx./mín. f/3.5-5.6. * Construcción del objetivo: 15 elementos en 11 grupos (con un elemento de cristal ED y un objetivo asférico híbrido). * Ángulo de imagen: 76°, 15°20’ (formato DX). * Distancia mínima de enfoque: 0,45 m. * Relación de reproducción máx.: 0,2 aumentos (1/5). * N.º de láminas del diafragma:7 (circular). * Enfoque Autofoco con SWM integrado y enfoque manual. * Tamaño de rosca para accesorios/filtros: 67 mm. * Diámetro x longitud: Aprox. φ76-89 mm. * Peso: Aprox. 450 g
Su precio, según Nikon USA, será de 399,95 dólares. Además se venderá también con la D90 en un kit por 1299,95 dólares. Más información | Nikon