Actualmente, ser fotógrafo es el deseo de muchos. Durante el siglo XX, los grandes maestros de la luz se encargaron explorar las posibilidades de sus cámaras y los rollos de celuloide para retratar momentos y personajes que definieron el rumbo del mundo. Pero esta práctica también se convirtió en una herramienta para capturar momentos personales y unirlos dentro de álbumes que serían llaves a un cúmulo de recuerdos.
Considerando que nuestra sociedad es totalmente visual, la publicidad y la mercadotecnia han aprovechado la fotografía como elemento comunicativo capaz de acercar mensajes y marcas a los consumidores. Lo mismo ha ocurrido en el mundo del deporte, porque además de la inmediatez que las audiencias piden, se necesita también de material visual que nos transporte a la emoción del momento.
Estas categorías de la fotografía han evolucionado tremendamente en el último cuarto de siglo y cada vez hay más fotógrafos intentando posicionarse como uno de los maestros en la materia. De hecho, son las principales motivaciones para que muchos estudiantes decidan carreras relacionadas con las comunicaciones y que incluso participen en concursos, como el Nikon Contender NPS Campus.
La pregunta es: ¿puede una universidad darte lo necesario como para convertirte en un fotógrafo publicitario o deportivo y destacar?
El camino de la fotografía publicitaria
Hoy en día existen muchas formas de tomar fotos: a través de sencillas cámaras que simplifican la tarea al máximo, pero también a través de sofisticados dispositivos que forman parte de todo un sistema de captura de imágenes. Las primeras se usan para capturar los momentos y recuerdos de cada día, donde la velocidad de captura es fundamental; mientras que el uso de los segundos requieren de un mayor nivel de conocimiento, técnicas especiales e, incluso, un lenguaje visual propio del fotógrafo.
Y sí, las universidades son capaces de llevar a los interesados en convertirse en maestros de la fotografía publicitaria a dar sus primeros pasos en entender la luz, las cámaras y los objetivos. Esto les permitiría experimentar diferentes métodos de captura de imágenes a fin de desarrollar un estilo propio que les permita diferenciarse de sus competidores.
En las aulas, una de las primeras cosa que verían los estudiantes sería una clase introductoria sobre la fotografía. En ella, se enseña la historia de la fotografía y su evolución, así como una serie de conceptos teórico-prácticos básicos que les permita usar sus cámaras apropiadamente. Y bueno, esta es una de esas materias donde la práctica es importante para poder comenzar a sensibilizar el ojo y descubrir nuevas formas de contar historias a través de crear distintas composiciones.
Una vez que se cuenta con el conocimiento teórico, jugar con las diferentes configuraciones de la cámara y practicar es fundamental. Probar distintas tomas, diferentes enfoques, encuadres y exposición para entender cómo se pueden transmitir distintos mensajes.
Cuando se conoce la cámara, es momento de comprender la iluminación. La teoría del color, la temperatura de la luz, la potencia de las fuentes lumínicas y su medición en interiores y exteriores. Obviamente, para los fotógrafos publicitarios un estudio es fundamental, pues éste les permite controlar cada aspecto de su toma.
Ahora, cuando se trata de un trabajo de fotografía publicitaria se requiere de muchas horas de preproducción conceptualizando la captura que transmitirá los mensajes y valores de las marcas. No sólo es entrar al estudio, poner un par de lámparas y comenzar a disparar el obturador a ver qué sale.
El camino de la fotografía deportiva
Una de las principales recomendaciones que se hacen al momento de practicar la fotografía deportiva es que domines el modo manual (o bien, semiautomático) de tu cámara, de manera que puedas controlar con mayor precisión -y acorde a tus necesidades- cuestiones como la velocidad de obturación como la apertura del diafragma. Estos dos elementos sobre la cámara los podrás aprender a controlar en tus cursos universitarios.
En fotografía deportiva, si quieres congelar un momento y obtener fotos nítidas, tendrás que usar velocidades de disparo rápidas. Pero no te preocupes, una vez que se cuenta con el conocimiento teórico, jugar con las diferentes configuraciones de la cámara y practicar es fundamental. Además, aquí podrías hacer uso de la opción enfoque automático, ya que en ocasiones tienes segundos para obtener la imagen que deseas y toda ayuda será bien recibida.
Muchos fotógrafos consideran que la categoría deportiva es otro deporte. Hay que decirlo, debido a la naturaleza de esta categoría de fotografía, muy probablemente necesitarás hacer uso de un teleobjetivo, lentes con una larga distancia focal. Y es que, por ejemplo, en competencias como el automovilismo o el futbol no siempre se tendría la posibilidad de instantáneas desde cerca.
Al igual que con la categoría publicitaria, dependerás mucho de tus conocimientos sobre iluminación, la gran diferencia aquí radica en que durante un partido de futbol, es muy complicado que puedas imponer las condiciones de luz. Será necesario que, si te dedicas a la fotografía deportiva, tengas presentes tus cursos y selecciones el ISO que te ayude a captar la imagen que deseas.
¿Cuántas veces hemos escuchado “jamás he usado lo que me enseñaron en la escuela para ejercer mi profesión”? Bueno, en el caso de la fotografía no ocurre lo mismo. Lo que se captó en las aulas se emplea cada día e, incluso, se sigue desarrollando con más cursos y capacitación. Hay una relación directamente proporcional entre la calidad de imágenes y el conocimiento de quien captura un momento con su lente.
La práctica hace al maestro
Como ya se mencionó, poner en práctica los conocimientos teóricos es fundamental para lograr obtener cada vez mejores imágenes. Claro que en los casos de la fotografía publicitaria y deportiva es más complicado, pues se requieren de un mayor número de elementos para ejercerlas.
Los fabricantes de cámaras han decidido apoyar el desarrollo del talento de las personas interesadas en la fotografía a través de caminatas con expertos o incluso competencias universitarias. Un ejemplo de ello es Nikon Contender NPS Campus, que cada año toca una especialidad. En 2016 los participantes pudieron profundizar sus conocimientos en fotografía de paisaje y este año toca el turno a la publicitaria y la deportiva.
De hecho, el ganador del año pasado, Ricardo Rosas comentó: “hay que confrontarse y enfrentar los retos, creo que deben de tener una relación de esfuerzo con su cámara diariamente. La fotografía va más allá de sacarse una bonita selfie o a algo que te vas a comer. Es importante hacer imágenes que te cuesten trabajo y que te exijan técnicas y alcances de tu equipo”. Y sí, para ello hay que tener el conocimiento que se obtiene en la escuela, además de la práctica.
Los cursos en las universidades son un el primer paso, una guía capaz de encaminar a los interesados en la fotografía; sin embargo, convertirse en un maestro de la luz requiere de mucha preparación, trabajo constante y el desarrollo de un lenguaje visual propio que sólo se puede obtener a través de la práctica y compartiendo experiencias con expertos y otros fotógrafos.