«Naturaleza asombrosa», de Francisco Mingorance: una mirada insólita capaz de reconciliarnos con nuestro entorno

Este libro de fotografía es de los que dejan huella. Cualquier persona que ame la naturaleza y se disponga a hojearlo, aun sin apenas ojearlo, estará perdida. La forma en que Francisco Mingorance, el autor de esta obra, se enfrenta a la fotografía de naturaleza es realmente única. Atrapa. La belleza de sus instantáneas te agarra con fuerza y te sumerge en sus páginas sin que puedas resistirte.

Antes de profundizar en lo que nos depara «Naturaleza asombrosa», un título que hace justicia al contenido de este libro, merece la pena repasar brevemente la trayectoria de su autor. Tan solo un par de apuntes. Mingorance está preparando actualmente varios reportajes para National Geographic, y, además, ha sido premiado en certámenes tan relevantes como el Veolia Environnement Wildlife Photographer of the Year 2010 y el Windland Smith Rice International Awards 2010, entre otros. Como carta de presentación no está nada mal, pero vayamos a lo que realmente importa: su libro.

Acabado y contenido

«Naturaleza asombrosa» es un libro bonito. Está encuadernado en cartoné y utiliza papel de un gramaje considerable que permite a las fotografías de su autor lucir como merecen. No tiene un acabado lujoso, pero sí muy cuidado, por lo que no puedo ponerle ninguna pega en este apartado. En cualquier caso, las auténticas protagonistas de este libro son sus más de 100 instantáneas, todas ellas premiadas en concursos internacionales.

Las auténticas protagonistas de este libro son sus más de 100 fotografías, todas ellas premiadas en concursos internacionales

Su contenido está organizado en torno a diez áreas temáticas diferentes que dan coherencia a las fotografías en función del medio retratado o la técnica utilizada por Mingorance para tomarlas. Son las siguientes: paisaje, aves, macrofotografía, composición y formas naturales, blanco y negro, mamíferos, dinámicas, mundos botánicos, nocturna y aérea. Cada capítulo comienza con un texto introductorio en el que el autor recrea la forma en que se enfrenta a ese reto fotográfico en particular. Y, de paso, comparte con los lectores algunas anécdotas que nos predisponen para acoger con los brazos abiertos las fotografías que disfrutaremos en las siguientes páginas.

Todas las instantáneas están acompañadas por un texto descriptivo en el que Mingorance nos explica en un lenguaje ameno y con un estilo cuidado las principales peculiaridades de las especies animales que ha retratado y las características de los entornos naturales que protagonizan cada una de las fotografías. Además, también enumera el equipo que ha utilizado para tomar todas las instantáneas y los parámetros de captura (sensibilidad, abertura y tiempo de exposición). Un anticipo por si tenéis curiosidad: los cuerpos que más emplea son una Nikon D3, una Nikon D3S, una Canon EOS-1D X y una Canon EOS 20D, entre otras cámaras.

Pasión por la naturaleza

Todas y cada una de las fotografías de Francisco Mingorance desprenden no solo un dominio absoluto de la técnica, sino también una pasión desmedida por la naturaleza. Me resulta muy difícil quedarme con uno o dos capítulos en particular, pero si he de escoger probablemente me decantaría por los que ha dedicado a los paisajes, la composición y las formas naturales, y, por último, a los mamíferos.

La mayor parte de sus instantáneas retrata la fauna, la flora y los paisajes de la península ibérica y nuestras islas

Pero lo que realmente hace especial este libro de fotografía es que la mayor parte de sus instantáneas retrata la fauna, la flora y los paisajes de la península ibérica y nuestras islas. En algunos capítulos Mingorance ha incluido fotografías tomadas en África, especialmente en el bloque temático que ha dedicado a los mamíferos, pero los auténticos protagonistas son los parajes andaluces, los paisajes pirenaicos, las tierras de Riotinto, los pinsapos de la Sierra de las Nieves y las sabinas de El Hierro, entre muchos otros lugares bellos que podemos disfrutar sin necesidad de cruzar nuestras fronteras.

Un último apunte interesante: en muchas de las fotografías nos indica el tipo de procesado que ha realizado, que habitualmente se reduce al ajuste de niveles y curvas, la saturación, el contraste y la máscara de enfoque. No suele aplicar recorte.

Nuestra valoración

«Naturaleza asombrosa» es un libro de fotografía realizado por un apasionado por la naturaleza, eso es más que evidente, y que disfrutarán especialmente las personas que compartan con Francisco Mingorance este mismo valor. Como mencioné antes, su acabado no es lujoso, pero sí impecable, y la expresividad de las fotografías que podemos disfrutar en su interior es inapelable.

En lo que concierne a la competencia de su autor en materia fotográfica, no hace falta que exponga nada más a su favor. Su trayectoria habla por él. Si te gusta la fotografía de naturaleza, regálatelo. En mi modesta opinión, este libro no debería faltar en tu colección si te gusta este tipo de fotografía.