Ahora suele ser el momento de las colecciones por entregas en los kioskos. Y cuando eres padre descubres que hay mil formas de gastar el dinero en tus hijos. Pero esta vez el que se llevó algo fui yo. Encontré dentro de la colección 'Playmobil profesiones' el libro y la figura que representan a los fotógrafos. Y puedo decir que el libro es perfecto para aprender.
De pequeño yo también quería ser quiosquero. Me parecía estupendo poder leer todos los tebeos y cómic de superhéroes cada vez que llegaban. Con el tiempo me desvié hacia la fotografía, así que nunca pudo ser. Pero me gusta mirar y comprar algo cuando paso por delante de uno. Así encontré la muñeca playmobil fotógrafa.
Lo mejor de todo es que iba con la familia y me lo regalaron. Me hacia gracia tener el muñeco en mi desordenada mesa pero lo que no me esperaba es el libro. Es para niños, pero tiene consejos estupendos para empezar que no he visto en libros más sesudos.
Y la muñeca es estupenda. Lo único que conociendo el problema de codos que tienen los playmobil creo que lo mejor hubiera sido contar con una cámara con pantalla abatible... Y hacia tiempo que no veía un Metz de antorcha.
'Playmobil, profesiones: Fotógrafos', un libro inesperado
El libro dedicado a la fotografía de Playmobil es para niños... Cuenta muchas cosas interesantes acerca de la profesión, luego viene un cómic y finaliza con una serie de preguntas que sabrás responder si te has leído el libro completo, de principio a fin.
Explica perfectamente en qué consiste la profesión, sin necesidad e utilizar palabras complejas y con ilustraciones para aprender. El primer capítulo está dedicado a conocer qué hacemos los fotógrafos; el segundo explica qué tienes que hacer si quieres convertirte en fotógrafo.
En la tercera parte ponen como ejemplo la vida y obra de Julia Margaret Cameron, una de las fotógrafas más reconocidas de la historia. La cuarta parte es la historieta y la última comprende los juegos... Al final aparecen tres consejos sencillos y perfectos, como este:
Hoy en día, los dispositivos digitales, como móviles y tabletas, nos permiten hacer fotos con facilidad, y existen muchos cursos para aprender los conceptos básicos, así que, si te gusta la fotografía, ¡hay muchas opciones para disfrutar con ella!
Pocas veces encuentras libros, manuales y vídeos que te animen a continuar aprendiendo algo que te gusta. No podemos olvidar que es para los más pequeños pero este espíritu sería muy de agradecer en las redes, donde hay (pocos afortunadamente) gente que disfruta poniendo la zancadilla si no eres de su entorno.
Un buen regalo y un capricho
Lo que más me ha gustado del libro es que destaca varias realidades de la vida laboral de un fotógrafo que muchas veces se olvida mencionar. La primera es que vivimos bajo presión cuando cubrimos diversos eventos. Tenemos muy poco tiempo para conseguir la fotografía perfecta y señalan:
Se necesita concentración, agilidad y mucha técnica.
También advierte que es un trabajo duro. Se vende la imagen idílica del fotógrafo relajado en el campo y se esconde algo que aquí remarcan, que te tienes que adaptar a distintos horarios, trabajar durante el fin de semana independientemente del tiempo que haga. La vida del fotógrafo no es fácil y no depende solo de la cámara que tengas...
Así que si quieres darte un gustazo este fin de semana busca un kiosco por tu barrio y pregunta por la colección. A lo mejor les queda este número suelto o lo vuelven a sacar pronto... El de los fotógrafos es el número 46. Y a lo mejor animas a los pequeños de la casa o los ahuyentas definitivamente.