Tras años de rumores (hace cinco años ya hablábamos de su posible lanzamiento), por fin Leica ha hecho oficial el lanzamiento de la Leica M10, nueva integrante de su exclusivo catálogo de cámaras telemétricas que llega, según la firma, "con un rendimiento mejorado, un manejo más intuitivo y luciendo unas dimensiones más compactas".
De hecho la cuestión del tamaño es quizá lo más significativo ya que la Leica M10 supone un paso importante para volver a la esencia de sus antecesoras del M-System original, cámaras de película que tenían una excelente ergonomía y un perfil muy delgado que se tuvo que sacrificar con la llegada de lo digital.
La nueva Leica M10 tiene un grosor de apenas 34 milímetros, cuatro menos que la Leica M (Typ 240) y sin duda es la digital más delgada del sistema M. Así, Leica asegura que la Leica M10 marca un nuevo hito en la historia de esta saga ya que aunque “todas sus funciones han sido adaptadas para satisfacer las necesidades precisas de la fotografía contemporánea, no ha habido ninguna desviación de los principios esenciales del legendario Sistema M”.
Además de la reducción de tamaño, externamente la cámara también presenta novedades pensadas para un manejo intuitivo dando un acceso rápido a los ajustes fundamentales en fotografía. De hecho, Leica afirma que por primera vez en un Leica M digital todos los parámetros esenciales de disparo (enfoque, apertura, velocidad de obturación y valor ISO) pueden seleccionarse manualmente sin necesidad de usar el menú o, incluso, encender la cámara.
Para ello se ha incorporado, como novedad, un dial de control de la sensibilidad en la parte superior izquierda. Por lo demás, la cámara sigue el concepto clásico y espartano en el tema del diseño con unos controles reducidos a lo esencial. De hecho los botones de la parte posterior, situados alrededor de una TFT de 3″ y 1.036.800 puntos, se limitan al joystick y a tres controles.
Sensor y procesador
Por lo que toca a los cambios internos, el sensor que monta la Leica M10 es un CMOS Full Frame de 24 MP sin filtro de paso bajo. Y aunque por la resolución puede parecer el mismo chip montado en las Leica SL pero mejorado, desde la cada afirman que se ha desarrollado especialmente para esta cámara y que ofrece “mejoras significativas en todos los parámetros relevantes para el rendimiento de la imagen: rango dinámico impresionante, excelente reproducción de contraste, nitidez excepcional y mejor resolución de detalles”.
Las novedades el sensor se centrarían en una nueva arquitectura de píxeles y microlentes que permite captar mejor los rayos de luz que llegan desde ángulos oblicuos, y una nueva cubierta de vidrio que actúa como filtro de infrarrojos y evita refracciones indeseables. También en la ausencia del tradicional filtro de paso bajo, eliminado para asegurar mayores niveles de nitidez.
Este sensor renovado amplía el rango de sensibilidades de la cámara entre 100 y 50.000 ISO, mejorando el control del ruido en las configuraciones de sensibilidad más altas. En cuanto al procesador, la cámara recibe la última generación del Maestro II, que ofrece una memoria buffer de dos gigas y un disparo en ráfaga de hasta cinco fotogramas por segundo a máxima resolución. Datos que no es que sean escalofriantes pero que desde luego superan los de las anteriores Leica M.
Otras características
Por supuesto, tampoco podíamos olvidarnos del telémetro, que siempre ha desempeñado un papel muy importante en el patrimonio de Leica. En la M10 esta tecnología de enfoque se ha optimizado para mejorar la visión del sujeto, el campo de visión se ha ampliado en un 30%, el factor de aumento se ha incrementado a 0,73 y también ha crecido (un 50%) la distancia desde el ocular al visor lo que lo hace más cómodo de usar, especialmente si se usan gafas.
Por lo demás, aunque la cámara no incluye la opción de capturar vídeo, sí que incorpora algunos elementos de última hornada como un módulo GPS integrado para geolocalizar las fotografías y otro WLAN. De hecho desde la casa remarcan que es la primera Leica M con conectividad WiFi integrada para permitir una rápida transferencia de imágenes, así como control remoto desde un smartphone o tablet, eso sí, con sistema operativo Apple.
Disponibilidad y precio
Disponible en dos acabados, Black y Silver, la cámara sale hoy a la venta con un precio alrededor de los 6.500 euros.
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