Fujifilm XF10, análisis: Discreta y sencilla pero capaz de convertirse en una “buena amiga” de los fotógrafos callejeros

Fujifilm XF10, análisis: Discreta y sencilla pero capaz de convertirse en una “buena amiga” de los fotógrafos callejeros

1 comentario Facebook Twitter Flipboard E-mail
Fujifilm XF10, análisis: Discreta y sencilla pero capaz de convertirse en una “buena amiga” de los fotógrafos callejeros

Presentada el pasado verano, la Fujifilm XF10 llegó al mercado de forma discreta con la etiqueta (según la propia marca) de ser un modelo “sencillo, ligero e ideado para viajeros”. Sin embargo, un par de “detalles” (una óptica fija de 28 mm ƒ2.8 y un sensor APS-C) llamaban la atención y nos hacían presagiar que este modelo tenía mucho más que decir. Nosotros hemos tenido la oportunidad de probarla y os lo contamos.

Y es que, con semejantes argumentos, estaba claro que esta no iba a ser una simple compacta. De hecho, a los street photographers no se les pasó por alto sus similitudes con la Ricoh GR, un modelo que data originalmente de 2013 y cuya tercera (y esperada) versión fue presentada en la pasada Photokina (con lo que debería llegar a lo largo de este año).

Fujifilm Xf10

La Ricoh es una cámara clásica de este ámbito, el de la fotografía de calle, caracterizada por un cuerpo sobrio (que pasa desapercibido) pero unas "tripas" bastante potentes, gracias a ese sensor cuyo tamaño casi nunca encontramos en una compacta y una óptica fija y bastante luminosa pensada para aportar su parte a la calidad de imagen. Y la Fujifilm XF10 sigue ese patrón ofreciendo una propuesta que fácilmente va a rivalizar con aquella cámara.

Así, más que para viajeros, queda claro que la Fujifilm XF10 es un modelo pensado para fotografía callejera y/o urbana, y tiene más que ver con modelos de la casa como la X70 o la X100F. Estos serían los escalones superiores dentro del catálogo de la casa en cuanto a compactas con óptica fija, quedándose la Fujifilm XF10 en la parte más baja (y económica) que, lamentablemente, prescinde del conocido sensor X-Trans. Pero veamos ya sus principales características:

Fujifilm Xf10

Fujifilm XF10: Especificaciones

Sensor CMOS APS-C de 24,2 megapíxeles efectivos con filtro de color primario
Óptica Fujinon 18.5 mm (28 mm equiv.) ƒ2.8
Sensibilidad 200 a 12.800 ISO (ampliada de 100 a 51.200 ISO)
Soporte de almacenamiento Tarjetas SD, SDHC y SDXC (UHS-I)
Formatos de archivo JPEG (EXIF 2.3) y RAW (formato RAF)
Tiempo de exposición 4 a 1/4.000 seg/ 4 a 1/16.000 (obturador mecánico/electrónico)
Disparo continuo Máximo de 6 fps (aprox 13 fotos JPEG)
Monitor LCD TFT de 3 pulgadas (1.040K puntos)
Calidad de vídeo máxima 4K 3840 x 2160 15p
Conectividad IEEE 802.11b/g/n y Bluetooth 4.1
Dimensiones 112,5 x 64,4 x 41 mm
Peso 278 gramos (con batería y tarjeta de memoria)
Precio 499 euros

Diseño, construcción y ergonomía

Fujifilm Xf10

Decíamos antes que esta cámara sigue la idea de la Ricoh GR pero, evidentemente, hay bastantes diferencias, tanto en el diseño como en el manejo y, por supuesto, en las prestaciones. Pero sin duda lo primera que salta a la vista es un diseño bastante más llamativo en el caso de la unidad que hemos podido probar. Y es que, como ya estáis viendo, “nuestra XF10” luce un aspecto bastante elegante, con un cuerpo de color dorado (champagne lo llaman) y de tacto metálico, más una parte de material imitación cuero marrón que cubre la pequeña empuñadura.

El diseño en color champagne e imitación piel es atractivo pero sin duda menos discreto si lo que se quiere es una cámara para pasar totalmente desapercibido en foto callejera

El acabado es bueno y da sensación de robustez y, por el lado estético, la cámara resulta bastante atractiva aunque, sin duda, también mucho menos discreta que la versión en color negro. Aún así, hay que decir que el modelo no llama mucho la atención, y desde luego difícilmente un posible retratado pensará que el fotógrafo tiene intenciones, digamos, “profesionales” a tenor de la cámara que lleva. Así las cosas, cumple con la premisa de ser discreta y no “delatar” al fotógrafo.

Por lo demás, el diseño es minimalista, especialmente en la parte trasera donde en principio hay pocos botones, siguiendo la tendencia iniciada por Fujifilm de dejar buena parte del trabajo para la pantalla táctil y el pequeño joystick que está sustituyendo la cruceta en todos sus modelos. En cuanto al resto de controles, hay más de lo que parece en principio.

Fujifilm Xf10

Y es que, si un vistazo rápido puede hacer pensar que apenas hay controles que puedan ayudar a trabajar con exposición manual, resulta que hay hasta tres: Una pequeña rueda que circunda el disparador, otra mucho más grande que hace lo propio con el objetivo y una tercera situada a la derecha del disparador.

La empuñadura es pequeña pero existe, no como en otras compactas avanzadas que prescinden de ella. Esto y la protuberancia en goma situada en la parte trasera derecha facilita el agarre con la mano diestra, aunque lo ideal es apoyarse también en la izquierda colocando los dedos prestos a accionar (si es necesario) la rueda alrededor de la óptica y que, en la práctica, es la zona que más sobresale del cuerpo de la cámara.

Fujifilm Xf10

Por cierto que aquí al lado encontramos una de las mayores pegas que le vemos al diseño. La cámara carece de sistema de cierre del objetivo, con lo que para tenerlo protegido se recurre a una tapa externa que se puede llevar colgada junto a la cinta de mano. El resultado es un poco incómodo, porque la tapa llega a estorbar muchas veces, aunque desde luego es mejor que tener una tapa suelta guardada quién sabe dónde.

Y ya que hemos entrado en aspectos negativos, mencionar también la mayor pega que encontramos: La ausencia total de movilidad de la LCD trasera. Esto es algo que limita mucho el uso si queremos disparar en ángulos distintos al habitual (por ejemplo con la cámara al nivel del pecho) y que sin duda se agradece en fotografía callejera para pasar desapercibido.

Fujifilm Xf10

Por lo demás, tampoco nos ha gustado mucho la disposición de los tres botones situados sobre la pantalla trasera (dos inmediatamente encima y otro ya en la parte superior de la cámara). Se trata de los botones de Playback (para ver las fotos), Drive (para elegir tipo de disparo y borrar fotos) y el Fn (personalizable con distintas funciones). Los dos primeros porque tienen una situación incómoda para su uso (uno no sabe muy bien qué mano utilizar para ello) y el tercero porque es tan pequeño que resulta difícil de apretar (y acaba infrautilizado).

Manejo táctil "delicado"

Fujifilm Xf10

De todos modos, como ya hemos adelantado, buena parte del trabajo recae en la pantalla trasera cuya interfaz táctil permite elegir el punto de enfoque, disparar y abrir distintos menús personalizables (a través de gestos con el dedo), además de pasar las fotos y hacer zoom sobre ellas en el modo de reproducción.

Al usar la pantalla como interfaz principal, la experiencia se parece bastante a hacer fotos con un móvil y desde luego se aleja de lo habitual en compactas más clásicas como la Ricoh GR

Este tipo de manejo “moderno” es algo de lo que, evidentemente, carecía la Ricoh GR, y aunque sí lo tendrá la tercera versión habrá que ver cómo lo implementan. En cualquier caso, en la Fujifilm XF10 es algo que marca el manejo de forma muy determinante. Lo cierto es que la experiencia se parece más a la de hacer fotos con un móvil, lo que desde luego la aleja del uso clásico de las compactas más sencillas.

Lo malo, como comentábamos en el análisis de la Fujifilm X-A5, es que la pantalla de la cámara poco tiene que ver con la de un móvil. La respuesta no es la misma y, sobre todo, el tamaño es mucho más pequeño. Así, la cantidad de iconos que aparecen en la pantalla hace que sea fácil perderse, que también lo sea activar cosas sin querer (y otras difícil conseguir lo que queremos) y, en definitiva, que el manejo resulte lioso.

Fujifilm Xf10 Muestras Fujifilm XF10 a 1/30 seg, f/5,6, ISO 800

Esto mismo más o menos es lo que nos ocurrió en la toma de contacto de la X-T100, que usa la misma interfaz táctil. Así que, aunque no sea algo exclusivo de esta marca (y seguro que se minimiza con la práctica), diríamos que no sería mala idea que Fujfilm "le diera una vuelta" para facilitar las cosas.

Y lo mismo tendría que hacer con el tema de la conectividad inalámbrica. De nuevo, nos costó muchos intentos conectar la cámara con el móvil. Desde luego no somos expertos en el tema, y entendemos que son cosas distintas, pero seguimos sin entender porqué es tan sencillo vincular algunos dispositivos (como un altavoz portátil) y tan complicado hacerlo con una cámara de fotos.

El otro punto clave en el manejo es el uso del pequeño joystick que resulta útil y cómodo. Eso sí, su uso es un poco desconcertante (e incómodo) por momentos, ya que unas veces se puede seleccionar la opción elegida simplemente apretándolo, y otras hay que pulsar el botón OK situado debajo. Igualmente, cuando hay que seleccionar valores en el Menú rápido (por ejemplo el ISO o las distintas opciones de Balance de blancos) hay que echar mano de alguna de las ruedas cuando sería mucho más sencillo poder usar el joystick directamente.

Fujifilm Xf10 Muestras 10 Fujifilm XF10 a 1/17 seg, f/4,0, ISO 3200

En definitiva, el manejo de la cámara es mejorable, aunque evidentemente no se trata de un problema grave, sólo algo que simplemente necesita de cierta práctica para ser asimilado y que, por tanto, no debería servir en absoluto para descartarla.

Prestaciones y enfoque

Pasando ya a este apartado, hay que detenerse un momento a hacer una puntualización. Si al principio dijimos que esta cámara pertenece a la familia de las compactas callejeras de Fujifilm, lo cierto es que tecnológicamente tiene mucho que ver con esos modelos recientes (la X-T100 y X-A5) que ya hemos citado. Porque la interfaz táctil no es lo único que comparten, de manera que tanto el sensor como el procesador y otras características son los mismas que estos modelos que, en la práctica, son los más sencillos de la familia X.

Fujifilm Xf10 Muestras 06 Fujifilm XF10 a 1/70 seg, f/5,6, ISO 200

Esto no es nada malo a priori, porque desde luego no estamos hablando de una cámara de alta gama. Pero sí que conviene saberlo, naturalmente, para poder evaluar sus prestaciones y los resultados que ofrece, empezando por ejemplo con el enfoque. Partiendo de la base de que ésta no es evidentemente una cámara destinada a capturar movimientos rápidos, lo cierto es que el enfoque se comporta bien en condiciones normales, pero con algunos matices.

El principal es que si vamos a utilizarla para fotografía callejera, tratando de hacer fotos rápidas (y pasar desapercibidos), a tenor de nuestra experiencia desaconsejamos el uso del AF porque no es lo suficientemente rápido. Así, seguramente es más interesante enfocar en manual echando mano de la distancia hiperfocal o la regla del F8 para asegurarnos un buen foco en las tomas (cosa que a nosotros nos costó entender, obteniendo bastantes tomas desenfocadas).

Fujifilm Xf10 Muestras 32 Fujifilm XF10 a 1/1350 seg, f/3,6, ISO 200

También existe un modo de enfoque especial Snapshot que ajusta el punto de enfoque en dos distancias (dos o cinco metros) y cierra el diafragma para conseguir mayor profundidad de campo, pero es evidente que en este tipo de circunstancias no podemos estar cambiando el parámetro en cada momento (por lo que es mejor recurrir a los métodos clásicos). Por tanto, para su uso en fotografía callejera, sobre todo cuando la luz es escasa, es más que conveniente estudiarse bien la cámara y practicar con sus distintos ajustes para no llenar la tarjeta con fotos desenfocadas y/o movidas (por cierto, no lleva estabilizador).

En cuanto a la autonomía, no hay mucho que decir porque nos ha parecido muy correcta. Como suele suceder, nuestras mediciones no fueron muy exactas, pero desde luego sí parece que cumple sin problemas los 330 fotogramas que Fuji declara se pueden hacer con una sola carga según las especificaciones.

Fujifilm Xf10 Muestras 35 Fujifilm XF10 a 1/80 seg, f/6,4, ISO 200

Por lo demás, como todas las Fujifilm, la cámara incluye un montón de características más o menos conocidas como los habituales modos de simulación de película, los filtros digitales, el modo panorámico, el de disparo a intervalos, las ráfagas de disparo en 4K, etc. Cosas que se salen un poco del concepto de cámara clásica pero sin duda completan el modelo para hacerlo más atractivo (aunque no sean utilizadas muy habitualmente).

Ruido y calidad de imagen

Fujifilm Xf10 Nivel Detalle Fujifilm XF10 a 1/125 seg, f/2,8, ISO 200

Pasando ya a este crucial apartado, de nuevo tenemos que volver a referirnos a lo que decíamos de su parecido con las X-T100 y X-A5, y recordar lo más importante que ya mencionamos al principio: Que su sensor es el mismo que ellas y, por tanto, es un CMOS de tipo Bayern en vez del famoso X-Trans de Fuji.

Fujifilm Xf10 Nivel Detalle Ampliación al 100% de la foto anterior. Fujifilm XF10 a 1/125 seg, f/2,8, ISO 200

Esto, como ya comprobamos con aquellos modelos, no es un problema teniendo en cuenta que estas cámaras no se dirigen (en principio) a usuarios demasiado exigentes. Sin embargo si quien la compra es un street photographer con cierta exigencia sí debería tenerlo en cuenta.

En cualquier caso, el resultado no es para nada malo. Como comentábamos a propósito de las cámaras mencionadas, las fotos que nos entrega este sensor tienen una calidad muy aceptable, con un alto nivel de detalle, buen rango dinámico y unos niveles de ruido contenidos hasta los 3.200 ISO. Además el resultado del objetivo es el esperado, con un buen rendimiento en las esquinas y sin distorsiones ni viñeteados apreciables.

Fujifilm Xf10 Nivel Iso Fujifilm XF10 a 1/13 seg, f/16, ISO 3200

Por el lado negativo, las tomas en JPEG que entrega la cámara pecan de cierta falta de garra y el procesado que se aplica por defecto para eliminar el posible ruido es un tanto agresivo haciendo que el resultado se asemeje a una acuarela (en los casos de ISOs altos). Eso sí, no olvidemos que estamos hablando de un sensor de tamaño considerable en un modelo compacto, con lo que los resultados ofrecidos sin duda deben superar a los de muchas cámaras de este segmento y, desde luego, a lo de los móviles.

Fujifilm Xf10 Nivel Iso 2 Detalle de la foto anterior al 100% y sin reducción de ruido. Fujifilm XF10 a 1/13 seg, f/16, ISO 3200

Fujifilm XF10, la opinión de Xataka Foto

Así las cosas, nuestra experiencia con la Fujifilm XF10 ha sido en general satisfactoria. No es una cámara que enamore ni llame la atención, pero sin duda es muy interesante para un determinado tipo de fotos. Desde luego no la recomendaríamos especialmente para viajes, sino (como venimos comentado) claramente para fotografía callejera.

Fujifilm Xf10 Muestras 01 Fujifilm XF10 a 1/3 seg, f/16, ISO 200

Lo que menos nos gustó, porque nos complicó la vida durante la prueba, fue el manejo que resulta algo confuso al complicarse la cosa por una interfaz táctil muy completa en una pantalla pequeña. Sin embargo, sin duda es algo que no se debería tener mucho en cuenta, primero porque siempre está bien tener muchas opciones; segundo porque todo es cuestión de acostumbrarse a una forma de trabajar.

Por tanto, la Fujifilm XF10 es una buena opción para fotógrafos callejeros que quieran una cámara de precio asequible con un gran sensor para llevar siempre encima. Eso sí, si los fotógrafos en cuestión tienen ciertas “inquietudes” quizá lo ideal sería que la XF10 fuera un complemento de un modelo superior (que sí tenga el X-Trans).

La nota de la Fujifilm XF10 en Xataka Foto

Características 7.5
Diseño y ergonomía 7.2
Controles e interfaz 6.0
Rendimiento 6.8
Calidad de imagen 7.7

A favor

  • Sensor grande en tamaño de bolsillo
  • Calidad de imagen
  • Cuerpo robusto y atractivo

En contra

  • Pantalla no articulada
  • Problemas de la interfaz táctil
  • Sin estabilizador

El equipo ha sido cedido para la prueba por parte de Fujifilm España. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas

Comentarios cerrados
Inicio