Ya os comentamos en la agenda sobre las exposiciones de septiembre que la extensa obra de Imogen Cunningham aterrizaría en Madrid, así lo hizo el 18 de septiembre y aquí estará hasta enero del año próximo. Es tal el legado que esta fotógrafa nos dejó, que ya me he dejado caer por la Sala Azca de la Fundación Mapfre en dos ocasiones. Y tú, ¿todavía no la has visto?
Hablar de Imogen Cunningham es darle un repaso a la Historia de la Fotografía a través de sus corrientes, primero porque participó en muchas de ellas, desde el Pictorialismo hasta el mítico grupo F/64 y, segundo, porque fue una visionaria que experimentó diversas técnicas regalándonos imágenes que a día de hoy nos siguen pareciendo absolutamente contemporáneas.
Esa imagen de visionaria es la que se ha utilizado para publicitar esta exposición, siempre hay que buscar un hilo conductor para hablar de un autor, y en este caso, si observamos cada una de las fotografías expuestas, llegamos a conocer porqué Cunningham, aquella que sellaba sus passepartouts con la palabra Imogen "ideas sin fin" como ya vimos en Xataka Foto y que podemos verlo in situ en la muestra, fue una fotógrafa que no dudó en ir un paso por delante gracias a la experimentación.
La exposición
En la exposición podemos ver sus fotografías de plantas, de las calles de Nueva York, de desnudos, de su propio desnudo, también de una chica que aparece abstraida con el pelo hacia abajo y que nos da de bruces con la fotografía contemporánea aún habiéndose tomado en 1969, de arquitectura y de actores de Hollywood.
Pasó por distintas etapas pero en ninguna de ellas desapareció su huella, en este sentido hay retratos que les separan 20 años de diferencia y nos parecen coetáneos. Utilizó filtros con texturas en la copiadora e hizo dobles exposiciones. Jugueteó con el futurismo. Se codeó con los grandes de la fotografía, podemos ver fotografías hechas a Stieglizt y al mismísimo Ansel Adams fotografiando un paisaje en una puesta en práctica de la fotografía dentro de la fotografía.
Viajera, familiar, fuente inagotable de ideas e incansable curiosa del mundo que la rodeaba, todo ello se ve reflejado en esta exposición imprescindible de una de las fotógrafas que mejor ha sabido jugar con la luz en la Historia de la Fotografía, historia que gracias a su dilatada carrera (murió con 93 años y seguía activa) nos enseña a través de más de 200 fotografías en esta exhibición todo lo que debemos saber sobre esta disciplina.
Para aquellos que no pueden venir a Madrid, es interesante el site de la Fundación Mapfre donde aparte de un extenso recorrido informativo de la exposición, está disponible la visita virtual a la muestra. No es lo mismo que verlo en vivo, pero es una buena opción para aquellos que tienen difícil acercarse.
Vídeo | Youtube Fotógrafa | Imogen Cunningham