Hasselblad realiza dos certámenes, el bienal considerado "El Nobel" de la fotografía: Hasselblad Awards y otro anual, el Hasselblad Master. Tras pasar una criba de más de diez mil trabajos, un español está entre los finalistas. Óscar Arribas, un burgalés que con veintiséis años fundó Moodstudio. Pese a que el premio es muy atractivo, ya que el ganador de cada categoría obtendrá un patrocinio por Hasselblad durante 4 meses para la realización de un proyecto, publicará en un libro conmemorativo del concurso y en la revista VICTOR, expondrá en Photokina donde recibirá su premio, realizará de una producción para Hasselblad y conseguirá una Hasselblad digital de medio formato.; llegar aquí es ya un éxito.
La gente puede votar en la web de Hasselblad a los mejores trabajos en todas las categorías. El voto del público contará como el de un miembro del jurado.
Para comenzar, una pregunta obligada: ¿Cómo, cuando y porqué empezó en la fotografía?
Con 16 años, por la influencia de mi madre que siempre viajaba con una olympus de formato medio (16x12mm) y de mi hermana que estudió periodismo y bellas artes. Me influenció mucho fotográficamente. Comencé en prensa local, después con agencias, luego como freelance, dejé Burgos y la calle para meterme en un estudio en Madrid y hasta ahora.
Óscar Arribas cursó estudios de técnico de laboratorio fotoquímico... ¿dónde?
En un instituto en Burgos. Al terminar secundaria la única oferta educativa relacionada con la fotografía que me era accesible fue el grado medio en Técnico de Laboratorio. Se centra sobretodo en el proceso fotosensible. Al salir en 2004 me vi sorprendido por el boom digital y tuve que reciclarme rápidamente pero con el tiempo se convirtió en una gran base. Aprendí lo bueno que es disparar película para educar el ojo.
¿Qué referentes recuerda de su primera etapa?
El primer fotógrafo que conocí que me impresionó mucho fue Edward Sheriff Curtis y su trabajo sobre nativos en norteamérica. Me ponía la piel de gallina.
En mi primera etapa me fijaba mucho en Koudelka, Natchwey o Doisneau. Después vinieron Patrick Demarchelier, Alberto García-Alix, Irving Penn, David Bailey, Max Vadukul…
Un autor "de cabecera"
Richard Ávedon. In the American West es mi gran debilidad.
Me sorprende gratamente su primera etapa, creo que Alix e Irving Penn han conquistado a varias generaciones de fotógrafos y son referencias en esas primeras etapas, en cambio con sus trabajos de publicidad, moda, parece que tiene claro desde el principio que lo suyo es el estudio.
Considero el estudio como una herramienta mas. Realmente solo llevo trabajando en estudio desde 2010 y me gusta el entorno controlado que te puede proporcionar un estudio aunque hoy por hoy se puede preparar un set en cualquier parte y eso te aporta ventajas que un estudio fijo no puede.
Todo evoluciona, las cámaras, los estilos y si hay algo especialmente efímero es la moda, si mira para atrás ¿qué cree que ha cambiado en la fotografía de moda en los últimos años?
En mi opinión se le está dando demasiada importancia al efectismo. Creo que si miramos atrás, antes con elementos visuales mas sencillos se conseguía mucha mas fuerza, pero es una opinión subjetiva y es un campo tan variado que es muy difícil definir una evolución clara.
No tener jefes, la creatividad, el reconocimiento son facetas muy positivas de tu trabajo pero ¿hay algo que no le guste de su trabajo?
La burocracia! Por suerte disfruto de todo por el momento.
En su trabajo "Los Últimos Mercaderes" parece salirse un poco de los retratos que ofrece en proyectos como "Maitre D'armes" o "Spanish Fencing", quizá porque en algunas el fotógrafo pasa más desapercibido, ¿que proyectos tiene en mente? ¿se alejará más del estudio?
Actualmente estoy preparando un trabajo sobre maestros de esgrima, al estilo de “Maitre d´armes” pero con una perspectiva mas global. Este tipo de proyectos me obliga a llevarme el estudio conmigo y para el retratado es mucho mas cómodo, y en el resultado final se nota. En "Los últimos mercaderes" llevamos el set fotográfico a los puestos de trabajo y notamos una ventaja considerable: la comodidad del retratado. Y eso se traduce en miradas y gestos sinceros.
Es finalista en el "Hasselblad Awards 2016" debe ser algo increíble, ¿como se digiere estar en una final de esta categoría?
Pues se digiere muy bien! Que reconozcan tu trabajo es algo increíble y cuando además lo hace una firma emblemática como Hasselblad y tras una criba de 10.700 trabajos uno siente que algo ha hecho bien. Me ha motivado mucho de cara a futuros proyectos.
Por cierto ¿usa usted Hasselblad?
Si, he trabajado mucho con una 503CW analógica y ahora estoy trabajando con una H3DII digital aunque también utilizo muchas otras cámaras de 35mm y gran formato.
La profesión de fotógrafo está muy complicada, ¿qué consejo daría a alguien que está empezando?
Que persevere, que si realmente se quiere, se puede. Hay que trabajar mucho, cada vez mas, pero merece la pena. Que valore su trabajo tanto a nivel personal como económico y que busque inspiración mas allá de fronteras, hay grandes genios desconocidos en países como Kenia o Singapur de los que se puede aprender mucho. No todo está en Europa o América. Que no hace falta tener la cámara del millón de dólares para crear grandes imágenes y que miren, observen y se empapen de lo que les rodea.
Para acabar y conocerle un poco mejor.... recomiéndenos una peli, una comida y un país al que viajar antes de morir.
Como película “Apocalypse Now” (soy fan de Storaro, el director de fotografía), de comer Tikka Masala o una olla podrida de mi tierra y si tuviera que recomendar un país antes de morir recomendaría este, alguno ganaría años de vida! Para los viajeros, Gales. Es un lugar lleno de mil peculiaridades.
Fotografía | Cortesía de Óscar Arribas
Título: Femme
Modelo: Maria Luengo
Maquillaje y peluquería: Sara Lara Carrasco, Rebeca Cabrera Abad y Sara Sánchez.
Estilismo: Marta Alejo & Sara Sánchez
Fotógrafo: Óscar Arribas
Ver 1 comentarios