Jorge Sierra (1966, Madrid) es un fotógrafo especializado en fauna y naturaleza que lleva más de 25 años trabajando detrás de capturar las instantáneas más espectaculares de animales y naturaleza en estado puro. Durante todo este tiempo ha recibido varios premios en certámenes nacionales e internacionales de fotografía de la naturaleza, y ha publicado alguna de sus fotos en publicaciones tan prestigiosas como National Geographic Magazine en su versión norteamericana.
Hemos charlado con él y nos ha contado cosas muy interesantes sobre su trayectoria y cómo es el trabajo de un fotógrafo de naturaleza.
Hola Jorge, encantados de que nos hables sobre ti y sobre tu trabajo. Cuéntanos un poco de tu trayectoria ¿Cómo empezaste? ¿Qué es lo que te llevo a convertirte en fotógrafo?
Comencé a hacer fotos con unos 16 años, con una cámara prestada de un hermano. Ya salía al campo y quería inmortalizar los pájaros que iba viendo. Y ya desde entonces sentía la necesidad de fotografiar la naturaleza aprovechando mis salidas al campo.
¿Fuiste en búsqueda de los animales o fueron ellos los que te encontraron? En otras palabras ¿por qué te especializaste en fauna y naturaleza?
Me gusta la naturaleza en todas sus expresiones, y desde joven iba identificando los animales que me iba encontrando, y luego los quería retratar. Era la época de las diapositivas y mi equipo era muy básico. Lo primero que tuve para naturaleza fue un Tamron 70-300 al que incluso le ponía un duplicador. Pero mi primer teleobjetivo decente fue un Sigma APO de 400 mm f:5,6. Y así pude hacer mi primer reportaje del Elanio Azul, un ave de presa por esa época poco conocida, que publiqué en Periplo.
¿Qué equipo sueles utilizar? ¿Qué es lo que llevas en tu mochila?
Siempre he utilizado equipo Nikon, pero cada vez más uso objetivos Tamron y Sigma, aunque los cuerpos siguen siendo Nikon. Y últimamente ando con una Olympus OMD EM5 a la que le acoplo los teles que tengo mediante una adaptador; gracias a su factor de multiplicación 2x me facilita mucho la fotografía de fauna salvaje. Ahora tiendo a ir mucho más ligero y no creo que tarde mucho en pasarme por completo a las cámaras sin espejo.
¿Qué supuso para ti el salto de la foto analógica a la digital?
Pues un gran alivio. Ahora mismo tengo cientos de miles de diapos que no sabes que hacer con ellas… Tengo unas 20.000 escaneadas para mi archivo, ¡pero quedan muchas que lo único que hacen es ocupar espacio! Y también para mí y para todos los profesionales, ha sido la universalización de la fotografía, por lo que hay muchos más fotógrafos e imágenes que demanda.
¿Cómo definirías tu trabajo?
Pues cómo de fotografía de la naturaleza en estado puro. Apenas uso el flash, ni tengo equipos complicados, baso mi fotografía en la manera natural de hacer las fotos, sin artificios. Componer bellas imágenes, lo que se consigue saliendo mucho al campo, que es lo que hago. Así tengo muchas más oportunidades de retratar la naturaleza cuando ésta se muestra realmente bella. Y todo en mi furgo camper, que ha ido mejorando con los años.
¿Cuáles son tus referentes?
Recuerdo mucho a Frans Lanting, y entre los españoles seguía el trabajo de José Luis Rodríguez. Cuando había pocos referentes… ¡Ahora te pierdes! ¿Qué les dirías a los jóvenes fotógrafos que empiezan?
Pues que disfruten sobre todo de la naturaleza, ya que como profesión ya no existe prácticamente. Ya nadie se puede dedicar en exclusiva a hacer fotos de naturaleza y pretender vivir de ello. No quita que se curren una foto o un tema, quizás para algún concurso o para un blog… No sé, pero como profesión que se olviden, como otras muchas hoy en día…
De todos los premios conseguidos ¿De cuál estás más satisfecho? ¿Qué importancia les das y cómo crees que influyen en el trabajo de los fotógrafos de tu campo?
Me hace especial ilusión el premio Foto Nikon a la mejor foto de naturaleza de 2010. ¡Es prestigioso y además de mi marca! Desde luego [los premios] aportan ilusión en esta larga carrera de fondo, y más ahora que estamos inundados de fotografía de la naturaleza increíbles. Cuesta mantenerse al más alto nivel.
Por tu trabajo pasas muchas horas esperando escondido en un hide ¿Es eso lo peor de tu trabajo? ¿Qué es lo mejor?
Ya casi no uso hides, aunque puedo decir que he pasado miles de horas en ellos… ¡Miles! Y no es nada malo, al contrario, puedes ver y fotografiar a la esquiva fauna ibérica a placer, con un trabajo previo de localización. Ahora hago más paisajes y de todo. Me centro en un espacio natural y retrato todo su entorno y sus criaturas si se dejan, desde una ranita o una flor hasta un corzo o un zorro, pero en encuentros casuales.
¿Cuál es tu último proyecto y cuál tu próximo reto?
Ahora estoy más centrado en el vídeo con réflex, el mundo de las fotos está sobresaturado y vamos a probar suerte con las imágenes en movimiento. Una muy buena excusa para renovar ilusiones y para pasar más tiempo en el campo. Y además me estoy centrando en los espacios naturales de la Comunidad de Madrid, que son muchos y de mucho interés, ¡y me pillan muy cerca! Ya se sabe, a veces conocemos mejor un destino lejano que lo que tenemos de valor cerca de casa…
¿Te gustaría contar algo más a los lectores de Xataka Foto?
Los tiempos cambian y con ellos la manera de hacer fotografías. Hay muchísimo donde elegir en equipos, mucha gente haciendo fotos por todo el mundo. Encontrar un hueco para tu trabajo es misión casi imposible, al menos de forma remunerada. Pero… en el caso de la fotografía de la naturaleza te llevas además el poder ponerte en contacto con nuestros campos, bosques, costas, montañas, valles… y su fauna, un privilegio por el que hacer fotografía de la naturaleza ya vale la pena.
Y ya sin más damos las gracias a Jorge y os dejamos con una buena selección de fotos escogidas por el propia autor para deleitaros la vista.
Foto de portada: Abubillas, de Jorge Sierra
Fotografías de Jorge Sierra publicadas con su permiso para este artículo