Ayer Adobe presentó y lanzó al público la nueva versión de sus soluciones de software de edición y revelado. Una de las novedades de este año, como os contamos anteriormente, es la herramienta de reemplazos de cielos. La hemos probado y analizamos los límites que tiene.
Lo primero, para acceder a la herramienta necesitamos actualizar nuestro software a Adobe Photoshop CC 2021. Una vez hecho esto, cargamos nuestra foto y, en el menú de herramientas, debemos ir a ‘Editar’ > ‘Reemplazar cielo’. Esto abrirá una nueva ventana con una interfaz como la de abajo.
En esta interfaz podemos seleccionar el nuevo cielo para nuestra imagen. En una segunda instancia tenemos una herramienta para afinar más el suavizado de borde y el recorte de horizonte. Luego tenemos unos controladores de temperatura, brillo y escala. Ajustes de la imagen original y cómo se compone con la escena. Finalmente la opción de exportar este ajuste como un grupo en capas (ideal para un flujo de trabajo no destructivo) o como una nueva capa duplicada.
Probando los límites del algoritmo
Para probar los límites de la herramienta hemos usado imágenes de una escena similar en condiciones de luz distinta. No se han ajustado los parámetros según foto para ver la capacidad de la herramienta desde un parámetro crudo. Sin embargo, algunos de los defectos encontrados pueden disminuirse o corregirse con estas herramientas de ajuste.
La primera condición de luz es una toma de un amanecer con contraluz sobre la escena.
Lo que se puede notar en general es un buen trabajo de identificar bordes. Sin embargo, cuando hay un contraste muy alto en el tono del fondo y el nuevo tono, el algoritmo que hace el reemplazo del cielo tiene más dificultades en ajustar e igualar la imagen, lo que resulta en cielos extraños. Es aquí donde hay que notar que es importante que la intención de luz de la escena con el cielo del resultado final sean similares para un mejor trabajo.
En el detalle fino podemos notar que el algoritmo tiene también dificultades identificando bordes con estas condiciones, por lo que el cielo parece sobreponerse sobre los detalles de la torre en la escena.
La siguiente condición de luz es una toma con luz de día nublado. Hay bordes un poco más suaves en el fondo, pero más diferencia en los tonos del borde sobre la torre.
En este tipo de escena vemos un trabajo mucho más realista en tono sobre la imagen. Sin embargo, seguimos notando problemas en los bordes del fondo.
Donde los edificios hacen transición suave con el fondo nublado notamos que el algoritmo ha decidido sobreponer el nuevo cielo, dejando un fantasma por debajo con los edificios anteriores. Sobre la torre vemos un mejor trabajo en el detalle fino.
La siguiente condición de luz es otro amanecer, pero ahora sin contraluz fuerte. Los bordes son mucho más definidos.
En esta condición de luz es donde el algoritmo de Photoshop hace el mejor trabajo. Tanto los bordes de la escena y los detalles finos logran sobrevivir creando una condición y un ajuste muy realista.
Finalmente, tenemos una escena con condiciones fatales. Es oscura, tiene mucho ruido de imagen, bordes suaves y poca información.
Vemos que el algoritmo necesita un buen nivel de información de bordes para poder identificar qué cortar y qué no.
Como podéis ver, el poder de la herramienta es muy alto. La ventaja de trabajar de manera no destructiva es un gran incentivo, pues nos permite trabajar con mayor facilidad, corregir errores de manera sencilla y hacer ajustes posteriores duplicando las máscaras que el software crea.
Esta fue la herramienta de reemplazo de cielos de Photoshop. ¿Ya la habéis probado en vuestras imágenes?