A lo largo de los cuatro artículos anteriores estuvimos repasando algunas de las principales soluciones que ofrece Linux para los pasos implicados en un flujo de trabajo fotográfico profesional. Este artículo pretende enumerar aquellas soluciones que complementan a las anteriores o que no pueden ser encajadas en ningún campo concreto. Y no por ello, resultan menos útiles.
Hugin, creación de panorámicas
Hugin es uno de esos programas que permiten el stitching de imágenes panorámicas a partir de otras de menor dimensión. Es quizás la herramienta más completa en este sentido de cuantas encontramos en Linux. Ofrece lo mismo que cualquier otra herramienta profesional de este tipo. Podemos elegir puntos de control, realizar una calibración de nuestra lente, corregir la perspectiva, etc.
Luminance HDR
Su nombre lo dice todo: se trata de una aplicación para generar imágenes de alto rango dinámico a partir de varias tomas. En este momento la última versión es la 2.3.1 y puede ser descargada gratuitamente para Linux, Mac y Windows.
Como todos los programas de este tipo, realiza la fusión de imágenes según un criterio concreto, y debe ser comparado con otros programas para generar HDR para ver si el estilo de las fotografías de salida encaja con lo que buscamos. En general tiene fama de no generar fotografías demasiado naturales, sino más bien esos HDR extremos que estamos acostumbrados a ver en Flickr.
Phatch, procesar en modo batch
Ya he hablado en alguna ocasión de este software. Su utilidad reside en la posibilidad de apilar tareas de procesado de imágenes para aplicarlas a cantidades enormes de fotografías. Su utilidad puede estar enfocada a clasificar y estandarizar grandes colecciones de fotografías para ser presentadas en una web, o generadas para un archivo fotográfico. Si queréis saber más, tenéis este artículo que pretende ser una pequeña introducción a esta herramienta.
Photoprint, gestión de color para impresión
Photoprint es un gestor de impresión fotográfica para GNOME. Es posible que los haya mejores, pero este es realmente flexible por su sencillez. Símplemente tenemos que seleccionar con el explorador de archivos la fotografía y la arrastramos a la ventana de Photoprint. Entonces podremos seleccionar perfiles de color, redimensión en función del papel y algún ajuste previo como la posibilidad de cambiar la temperatura de color, un marco creativo o introducir una pequeña máscara de enfoque.
ColorHug, calibración de monitores
Pese a que Linux es capaz de reconocer los principales colorímetros del mercado, debéis saber que existe uno específicamente diseñado para Linux. Y pese a no tener la forma de una nave espacial ni luces especialmente atractivas para el consumista, debo decir que realiza su papel realmente bien. Es rápido y efectivo. Su nombre es ColorHug, y ya he hablado de él en otras ocasiones.
Pero si no quieres utilizarlo porque ya dispones de un colorímetro y además Linux te lo detecta, puedes utilizar Argyll, una aplicación que es incluso más completa que la que viene de serie con la mayoría de colorímetros.
Photo Film Street y Openshot
Photo Film Street es un sencillo pero potente programa que nos permitirá realizar animaciones de vídeo con nuestras fotografías y la música que queramos. Tenemos la posibilidad de seleccionar muchos efectos de transición, y el formato de vídeo de salida. Eso sí: no dispone de muchas más opciones.
Si queremos hacer algo más avanzado, e incluir títulos de crédito, video, etc, podemos usar herramientas más avanzadas como Openshot. Por el hecho de ser un programa con muchas opciones para la edición de vídeo, no renuncia a ser muy sencillo e intuitivo de utilizar.
Conclusión
Esto no es más que una pequeña lista que representa una gota de agua en el océano de aplicaciones disponibles para Linux. Seguramente, el que ya haya adoptado Linux para su trabajo haya elegido otras alternativas tan buenas como estas. Os animo a compartirlas en los comentarios.
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