Sony HX50V, análisis

Nacida para el zoom. Nacida para alcanzar los detalles más secretos desde larga distancia. Una compacta avanzada con un objetivo especializado en acercarse a las escenas más lejanas.

Las sensaciones que deja esta Sony HX50V son las de la ser una especialista así como la de crear "cierta adicción" a usar el zoom. No estamos hablando de una cámara que permita considerarse ni bolsillera (no es tan pequeña aunque podría entrar en esa categoría) ni todoterreno. Funciona muy, muy bien con buena luz y en todo el rango focal que permiten esos 30 aumentos y el estabilizador incorporado.

Antes de comenzar, demos un repaso, como es habitual, a las especificaciones principales de esta cámara:

• Sensor CMOS Exmor R de 20,4 MP, Tipo 1/2,3
• Zoom óptico de 30x, más zoom digital 2x
• Lente Sony tipo G
• Hasta 10 fps en modo ráfaga
• Estabilizador SteadyShot óptico
• Modo iAuto (F3,5-F6,3 (G)) / Programa automático (F3,5-F6,3 [G]) / Manual (F3,5-F8,0 [G]) /Prioridad de apertura (F3,5-F8,0 [G]) / Prioridad de obturador (F3,5-F6,3 [G])
• Modo Panorámico: 360° (11.520 x 1.080) / HR (10.480 x 4.096) / Gran angular (7.152 x 1.080/4.912 x 1.920) / Estándar (4.912 x 1.080/3.424 x 1.920)
• Sensibilidad ISO: ISO100-3200 (iAuto), ISO100-12800 (automático superior), ISO100-1600 (Program Auto)
• Pantalla LCD de 3 pulgadas
• Conectividad Wi-Fi
• GPS
• Dial de control de exposición EV

Ergonomía y Diseño

Este modelo sustituye al anterior modelo, Sony HX30V, siguiendo la línea de la gama zoom de Sony con menos ampliación óptica. En términos de peso, 272g, está más o menos en los parámetros de toda la gama aunque resulta ser algo más gruesa.

El grip de goma resulta bastante cómodo y es una buena ayuda a la estabilización de la cámara en cuanto se tiene entre manos, haciendo que el agarre sea fuerte y se pueda llevar en la mano sin necesidad de usar la correa, aunque como siempre os recomiendo utilizarla.

En la parte superior nos encontramos con el clásico dial de compensación de la exposición a la altura del dedo pulgar que cuenta con pasos de 1/3EV pudiendo compensarla hasta dos pasos. Junto a el encontramos el otro dial, PASM, con los distintos modos manual y semimanuales más otros cuantos de escena.

El botón de apagado, aparece casi a ras, lo cual, a veces, resulta algo molesto. A su lado el clásico botón para control del zoom. En general, los botones se encuentran a una distancia precisa resultando, salvo lo ya comentado, bastante cómodos.

Por la parte trasera recuerda mucho a su hermana HX20V y presenta, con respecto a su tamaño, una pantalla de tres pulgadas que ocupa casi todo, permitiendo que se visualicen muy cómodamente las imágenes tomadas.

Un detalle bien pensado: un pequeño reborde de goma permite colocar cómodamente el dedo pulgar para mejorar el agarre desde la parte trasera, aunque es fácil que en alguna ocasión se active por accidente la grabación de vídeo, puesto que el botón rojo de grabación está justo al lado. Justo debajo el botón "custom" o de personalización que nos permite configurar distintas acciones. Por defecto está configurado para regular la ISO, lo cual me resultó de bastante utilidad así que es la opción que dejaríamos para trabajar habitualmente.

A continuación la rueda de reproducción habitual en muchas cámaras y botón central para diversas acciones. Completa la parte trasera un botón de acceso al menú y el de borrado de fotografías.

El cuadro general del diseño se completa con un puerto USB que permite, además de la transferencia de imágenes, la carga de la propia cámara a través del mismo. También un puerto mini-HDMI en la base de la cámara cuya ubicación no es algo habitual.

Rendimiento

El zoom de la Sony HX50V cubre un equivalente, en formato 35mmm, de 24mm a un 720mm, algo a lo que no se acercan ni de lejos algunas de sus posibles rivales como podrían ser las Panasonic ZS30/TZ40, la Canon SX280 HS o la propia Sony WX300. El motor del zoom es relativamente tranquilo, aunque si hay poco nivel de ruido lo notaremos cuando grabemos vídeo.

En ocasiones el funcionamiento del zoom ha resultado algo lento cuando estamos al máximo de zoom y deseamos rebajarlo, lo cual resulta algo molesto cuando queremos recalibrarlo para recomponer la escena. Por contra, una vez puesto el zoom en su sitio el autoenfoque resulta muy rápido y no hemos encontrado problemas en ninguna ocasión, comportándose en la mayoría de las veces, sorprendentemente preciso.

En cuanto a lo demás el rendimiento es bastante fluido y manejable no presentando problemas significativos de ningún tipo ni en la captura de imágenes ni en la grabación. En modo Macro funciona bastante bien como vemos a continuación.

La Sony HX50V está equipada con estabilización óptica SteadyShot que funciona realmente bien. Alguna toma hemos podido realizarla a 1/20 o 1/30 a mano y con el zoom al máximo con unos resultados realmente sorprendentes gracias a su estabilizador.

Calidad de imagen

Aunque esta cámara permite un zoom digital de 2 aumentos (permitiendo llegar a 1440mm, equivalente en formato 35mm), no tienen nada que ver los resultados is los comparamos con los del zoom óptico que dan muy buena calidad de imagen en todo su rango focal. El zoom óptico da unos resultados muy buenos salvo en el extremo más angular que el resultado resulta ser algo blando pero nada que no pueda resolver la máscara de enfoque. Aunque si estamos en una ISO baja pues de lo contrario ...

En cuanto subimos la ISO por encima de 800 empezamos a notar cierto ruido lo cual decepciona un poco en una compacta de estas características si lo unimos a cierta falta de detalle que sorprende. El problema no es tanto ese ruido como esa falta de detalle. A ISO 1600 la pérdida de detalle es ciertamente notable. Siempre comparando con ISO 100.

En rangos de ISO bajos, 100 o 200, el detalle es magnífico. Incluso a 400. Extraña esos resultados algo decepcionantes a partir de 800. Por contra, en condiciones de buena luz los resultados son muy buenos.

Conclusiones

Aunque dijimos que no es una todoterreno, esto es más fruto de la experiencia propia con la cámara, pero la cámara permite adaptarse tanto a retratos, paisajes, calle, fotografía documental o de viajes. Es sólo que usarás el zoom demasiado.

Con un precio que se sitúa en la media de los 400 a 500 euros que suelen costar las compactas avanzadas, 439 euros (en la web de Sony España), es una buena opción para aquellos que necesiten realizar fotografías desde larga distancia y no puedan contar con el teleobjetivo de la réflex siempre a mano o para aquellos que deseen realizar fotografía callejera con su largo zoom.

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