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Nikon D7200, análisis

Nikon D7200, análisis

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Nikon D7200, análisis

Nikon ha apostado sobre seguro con su nueva D7200. O, al menos, lo ha intentado. Ha mantenido lo que funcionaba en la D7100, un modelo equilibrado y todoterreno que nos gustó mucho cuando lo analizamos, a mediados de 2013, y ha mejorado aquellos apartados en los que tenía margen para evolucionar. Y no son pocos. Probablemente la mejora más relevante es el enfoque, que ha pasado del sistema Multi-CAM 3500DX de la D7100 al Multi-CAM 3500DX II de esta D7200. Pero hay otras novedades en las que merece la pena que nos detengamos.

El nuevo modelo incorpora un procesador de imagen Expeed 4, un buffer con más capacidad que ahora es capaz de almacenar hasta 18 fotografías RAW o 100 JPEG, graba vídeo con una calidad máxima de 1080/60p, tiene WiFi y NFC, y, de propina, su autonomía pasa de los 950 disparos de su predecesora a 1.110 disparos. Pero todo esto solo es lo que nos ofrece la D7200 sobre el papel. Veamos cómo se ha portado durante nuestras pruebas y qué sensaciones transmite esta a priori interesante DSLR en formato DX.

Nikon D7200: especificaciones

Sensor CMOS APS-C de 24,2 megapíxeles
Procesador Expeed 4
Enfoque Sistema AF de 51 puntos Multi-CAM 3500 II. Reduce la sensibilidad hasta -3 EV (ISO 100, 20 °C)
Sensibilidad De 100 a 25.600 ISO
Velocidad de obturación Hasta 6 FPS en formato DX y hasta 7 FPS en modo recorte de 1,3 aumentos. Hasta 27 imágenes RAW de 12 bits y hasta 100 imágenes JPEG de alta calidad en una sola ráfaga de alta velocidad
Conectividad WiFi y NFC
Grabación de vídeo Full HD en formato DX a una velocidad de hasta 25p/30p, o modo recorte de 1,3 aumentos y graba a hasta 1080/50p/60p.
Visor Pentaprisma con cobertura aprox. del 100%
Monitor Pantalla LCD antirreflectante de 3,2 pulgadas y 1.229.000 puntos de resolución
Flash incorporado Flash i-TTL inteligente y función de controlador inalámbrico
Resistencia Resistente al polvo y a la humedad. La unidad de obturador permite alcanzar 150.000 disparos.
Autonomía Hasta 1.110 imágenes estáticas y hasta 80 minutos de metraje de vídeo con una sola carga con la batería recargable de iones de litio EN-EL15.
Almacenamiento Dos ranuras de tarjetas SD, compatibles con tarjetas SDXC y UHS-I de alta capacidad
Dimensiones 135,5 x 106,5 x 76 mm
Peso 765 g con batería y tarjeta de memoria
Precio 1.349 euros con el objetivo AF-S Nikkor DX 18-105 mm f/3.5-5.6G ED analizado

Misma resolución, mejor enfoque

La resolución del sensor APS-C (DX) que incorpora la D7200 es muy similar a la del captador de la D7100, aunque no idéntica: ha pasado de los 24,1 megapíxeles de esta última a 24,2 megapíxeles en la nueva cámara. Por otro lado, la D7200 mantiene la construcción resistente al polvo y la humedad con la que ya contaba su predecesora. En mano ofrece un agarre estable y cómodo gracias a sus generosas dimensiones, aunque no son exageradas, y a un grip bastante pronunciado. Todo acorde a lo que cualquiera que conozca las DSLR de Nikon esperaría de una cámara como esta. ¿Y su construcción? De una gran solidez, así que en este apartado no tengo nada que objetar.

Nikon no ha dejado pasar la oportunidad de integrar en este modelo su procesador de imagen Expeed 4, el mismo que podemos encontrar, por ejemplo, en las superiores D810 y D810A. Yo no fui el editor que probó en su momento la D7100, y por esta razón no tengo una referencia directa del rendimiento del procesador Expeed 3 de esta cámara, pero sí puedo deciros que el comportamiento global de esta DSLR es fluido, y, como veremos más adelante, su contribución a la hora de permitir que el sensor y la óptica den lo mejor de sí mismos en términos de nivel de detalle, precisión tonal y nivel de ruido es importante.

Enfoque1

En cualquier caso, una de las mejoras más relevantes introducidas por Nikon en la D7200 atañe directamente a su enfoque automático, que está derivado del que podemos encontrar en la familia FX. Como he mencionado al principio del post, esta cámara recurre al sistema Multi-CAM 3500DX II. Emplea detección de fase TTL y 51 puntos de enfoque, 15 de ellos en cruz en la parte central, pero lo que realmente le permite aventajar a la D7100 es que incrementa la sensibilidad de los puntos de enfoque de los -2EV de esta última cámara a -3EV en todos los puntos de enfoque de la D7200. Como veremos más adelante, esta mejora incide de una forma muy clara en la capacidad de enfoque automático en escenarios con escasa luminosidad, por lo que en estas circunstancias esta nueva cámara aventaja claramente a su predecesora.

Enfoque2

Un apunte interesante antes de seguir adelante. Como he mencionado al principio de este apartado, el sensor de la D7200 tiene casi la misma resolución del captador de la D7100. Sin embargo, este «casi» nos está indicando que ambos sensores son diferentes. De hecho, se comenta que el de la D7200 es un nuevo captador fabricado por Toshiba que supera el rango dinámico del que utiliza su predecesora, y, además, no adolece de los problemas de banding de los que informaron algunos usuarios de la D7100, y que se manifestaban bajo la forma de unos artefactos que aparecían como patrones de líneas verticales u horizontales en algunas de las fotografías tomadas en condiciones de alto contraste.

Vídeo y conectividad mejorados

Es evidente que Nikon sigue sin apostar por la grabación de vídeo 4K/UHD. Esta cámara no nos ofrece esta opción. Eso sí, a diferencia de la D7100 nos permite recoger imágenes Full HD con una cadencia máxima de 60 FPS en formato progresivo, aunque para alcanzar esta cifra es necesario recurrir al modo de recorte de 1,3 aumentos. Si no lo hacemos tendremos que conformarnos con unos más modestos 25p o 30p en modo Full HD. En cualquier caso, la calidad global de los vídeos que podemos grabar con esta cámara es alta.

El vídeo también ha mejorado: la D7200 puede grabar secuencias de hasta 1080/60p con recorte 1,3x

Yo me quedaría con su gama dinámica y riqueza tonal, más que suficientes para satisfacer las necesidades de cualquier usuario medio, e, incluso, avanzado, que vaya a utilizar como dispositivo de reproducción un televisor Full HD. Quien ya se haya hecho con una tele UHD y quiera sacarle el máximo partido tendrá que tomar otro camino porque con la D7200 no podrá grabar vídeos con esta resolución (3.840 x 2.160 puntos).

Video

Cambiando de tercio, en lo que concierne a la conectividad es evidente que Nikon ha escuchado a los usuarios que reclaman poder disfrutar un enlace WiFi sin necesidad de optar por accesorios que encarecen el coste de la máquina, y que, además, suelen complicar algo su uso. La D7200, a diferencia de su predecesora, tiene WiFi y NFC. Para transferir nuestras imágenes y controlar de forma remota la cámara solo tenemos que instalar en nuestro teléfono móvil la aplicación Wireless Mobile Utility.

A partir de aquí el procedimiento de conexión es similar al que nos proponen otros fabricantes, y resulta bastante sencillo, por lo que no creo que plantee dificultades a nadie. Eso sí, si nuestro smartphone tiene NFC la negociación de la conexión inalámbrica es prácticamente transparente para el usuario, lo que se agradece, especialmente si no nos sentimos demasiado cómodos con este procedimiento, que tiene más de informática que de fotografía.

Así se porta la D7200 «en combate»

Esta es una cámara asequible, especialmente para los usuarios que ya están familiarizados con otros modelos de Nikon. Las indicaciones de los diales son claras y su considerable diámetro permite manipularlos con comodidad. Además, la D7200 transmite la sensación de ser una cámara diseñada para acompañarnos a cualquier entorno, por agresivo que sea, y salir indemne, lo que siempre se agradece. Durante nuestras pruebas utilizamos uno de los objetivos disponibles en uno de los kits, un AF-S Nikkor DX 18-105 mm f/3.5-5.6G ED, que, como podéis ver, es una óptica bastante versátil que nos permitió poner a prueba la cámara en escenarios de captura lo suficientemente diversos.

Combate1

Si he de elegir una cualidad de esta cámara que le permite desmarcarse con bastante claridad de las DSLR que he analizado durante los últimos meses me quedaría, sin dudarlo, con su enfoque automático. Rendir bien cuando abunda la luz es fácil, pero la cosa se complica mucho si la luminosidad ambiental escasea. Y aquí la D7200 se siente cómoda. Todos los puntos de enfoque, y no solo los centrales, son capaces de «bajar» hasta los -3EV, y esto se nota porque permiten a la cámara bloquear el enfoque con más rapidez y precisión cuando hay poca luz, e independientemente de la posición del punto de enfoque.

También me ha sorprendido positivamente, sobre todo si tenemos en cuenta que la D7200 es una cámara de precio moderado y no una propuesta con vocación profesional, su enfoque por seguimiento. El algoritmo de análisis de la imagen diseñado por Nikon para permitir a la cámara mantener el enfoque en el sujeto que estamos fotografiando funciona realmente bien incluso cuando la distancia que existe entre la cámara y el sujeto se modifica rápidamente. En estas circunstancias el reenfoque se lleva a cabo con rapidez y precisión, por lo que inevitablemente me ha recordado a las prestaciones que en este escenario de uso nos ofrecen las cámaras profesionales, cuyo precio, obviamente, suele ser claramente superior.

Combate2
En modo DX podemos disparar en ráfagas de 6 FPS, que alcanzan los 7 FPS con el recorte 1,3x

Más características de esta cámara que me han dejado un buen «sabor de boca». Nos permite tomar ráfagas de hasta 6 FPS en modo DX y 7 FPS si optamos por el recorte a 1,3 aumentos, cifras interesantes, pero no sorprendentes. Lo que me parece más atractivo es que el incremento del tamaño del buffer y la integración del procesador de imagen Expeed 4 nos permiten disparar «a discreción» varias ráfagas consecutivas sin temer que esta memoria intermedia vaya a llenarse enseguida. De hecho, como mencioné antes, puede almacenar un máximo de 27 fotografías en formato RAW de 12 bits y hasta 100 en JPEG de alta calidad. Como veis, no está nada mal.

En lo que se refiere al visor óptico, no tengo nada que objetar. En escenas a contraluz rinde muy bien y es bastante luminoso. Y el monitor LCD TFT, de 3,2 pulgadas y con una resolución de 1.229.000 puntos, tiene un nivel de detalle suficiente y una riqueza cromática muy satisfactoria, por lo que podemos utilizarlo para previsualizar nuestras fotografías con confianza.

Calidad de imagen

Antes de seguir adelante me parece necesario hacer un inciso: las fotografías que os dejo a continuación no hacen justicia a los archivos originales en lo concerniente a su nivel de detalle debido a la compresión adicional que lleva a cabo nuestro gestor de contenidos. Aun así, son interesantes para que podáis intuir qué nos ofrece la D7200 junto a la óptica que hemos utilizado en las pruebas. Como podéis ver si observáis con calma la región ampliada de la fotografía que tenéis debajo de estas líneas, el detalle que nos ofrece el trinomio constituido por el captador de esta cámara, el procesador de imagen Expeed 4 y la óptica es alto. Me gusta el procesado JPEG que realiza la D7200 porque es poco agresivo, lo que le permite generar unos archivos que respetan de una forma bastante fidedigna la gama cromática y la riqueza tonal capturadas por el sensor sin introducir artefactos de compresión molestos.

Dsc 0057 Nikon D7200 a f/5.6, 1/125 s y 800 ISO

Como he mencionado antes, el rendimiento de esta cámara cuando la luz ambiental no abunda es muy bueno. La siguiente fotografía está tomada durante el atardecer, unos minutos antes de que anocheciese completamente. La luz ya comenzaba a ser escasa, y, aun así, la cámara bloqueó el enfoque sobre el agua en movimiento sin inmutarse. Todo perfecto hasta aquí. Sin embargo, podéis ver que la fotografía está algo subexpuesta a propósito para ver cómo resuelve la D7200 en estas circunstancias las altas luces, y lo cierto es que las satura ligeramente, perdiendo algo de detalle. No es nada dramático, pero ahí está.

Dsc 0015 Nikon D7200 a f/8, 1/500 s y 720 ISO

Esta tercera imagen está tomada en un entorno bastante oscuro. De hecho, la figura solo estaba iluminada desde arriba por una luz tenue. Y, aun así, la D7200 no solo enfocó perfectamente; también arrojó un nivel de detalle muy alto y una riqueza cromática convincente que se aprecia en toda su plenitud si se compara la imagen original en un monitor correctamente calibrado con los colores de la figura de muestra. Eso sí, aquí tuve que incrementar claramente la sensibilidad a 3.200 ISO, un valor lo suficientemente moderado como para que el ruido todavía no haga acto de presencia.

Dsc 0078 Nikon D7200 a f/5.6, 1/30 s y 3.200 ISO

Vamos ahora con el que para muchas cámaras es el apartado más peliagudo: el nivel de ruido a altas ISO. A 3.200 ISO el ruido es prácticamente inapreciable. A 6.400 ISO se incrementa levemente, pero es un valor perfectamente utilizable. Ni siquiera a 8.000 ISO me parece que el ruido arruine una fotografía tomada con esta cámara. Eso sí, a partir de 12.800 ISO el panorama empieza a cambiar. Con este valor de sensibilidad el ruido ya puede apreciarse con claridad, y con valores superiores su presencia es molesta. Grosso modo yo diría que la D7200 nos permite utilizar con bastante ligereza, si las circunstancias lo exigen, valores de sensibilidad de hasta 6.400 u 8.000 ISO, pero yo me pensaría dos veces incrementarla más porque el ruido se hace demasiado evidente.

Sensibilidad

Nikon D7200, la opinión de Xataka Foto

Opinion

Si habéis leído todo el post antes de llegar a estas conclusiones os habréis dado cuenta de que mi valoración de esta cámara es positiva. Es más, en algunos apartados me parece, incluso, sobresaliente. Su cualidad más atractiva, en mi opinión, es su enfoque automático. Y es que es de los más logrados que podemos encontrar en una DSLR actualmente por su comportamiento en tomas con escasa luz y su rendimiento. Por otra parte, la calidad de imagen global de la cámara es alta, lo que unido a una construcción robusta y preparada para soportar estoicamente el polvo y la humedad, posiciona a la D7200 como una auténtica todoterreno.

También me parece bien que Nikon se haya esmerado en pulir el apartado del vídeo, a pesar de que la grabación 4K/UHD sigue sin estar disponible, y que por fin haya apostado por el binomio WiFi/NFC. En su «debe» esta cámara tiene esa ligera saturación de las altas luces que aparece en determinados escenarios de captura y el hecho de que para grabar vídeo Full HD a 50p y 60p tengamos que activar necesariamente el modo de recorte 1,3x. Aun así, me parece una gran opción en su segmento que aconsejo tener en cuenta a cualquier fotógrafo que busque una DSLR todoterreno que no supere los 1.500 euros junto a una buena óptica.

La nota de la Nikon D7200 en Xataka Foto

Características 7,8
Diseño y ergonomía 8
Controles e interfaz 8,3
Rendimiento 7,9
Calidad de imagen 8,4

A favor

  • Enfoque rápido y fiable incluso con poca luz
  • Alta calidad de imagen global
  • Construcción robusta y conectividad flexible

En contra

  • Ligera saturación de las altas luces
  • Vídeo 1080 a 50p y 60p solo con recorte 1,3x
  • Que no nos dé la opción de grabar vídeo 4K/UHD

La cámara ha sido cedida para el análisis por parte de Nikon España. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.

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