Canon EOS 6D, análisis

A finales de verano apareció finalmente lo que muchos usuarios venían demandando dentro del sector fotográfico DSLR, la inclusión de una gama Full Frame algo más económica que la que había hasta el momento. Esa gama de modelos Full Frame llevaba asociado un precio excesivamente alto, por lo que muchos aficionados avanzados veían con malos ojos disponer de una cámara como las recien estrenadas 5D Mark III o 1D-X. Y es aquí cuando Canon (y también Nikon) entra en escena sacando al mercado la Canon EOS 6D, un modelo con sensor FF pero algo mas descafeinado que su hermana mayor, o lo que es lo mismo, incluir una cámara entre la actual Canon 7D y la 5D Mark III, de double frame.

Finalmente, en Xataka Foto hemos podido echarle el guante a esta nueva DSLR de Canon para poder daros algunas impresiones más concretas de la misma; pero antes recordemos por encima alguna de sus características:

• Sensor ?Hybrid? CMOS de 20,2 megapixeles de formato full-frame (24×36mm)

• Procesador Digic V+

• 11 puntos de enfoque, con un AF por detección de fase

• ISO de, 100 ? 25.600

• Ráfaga de hasta 4,5 fps

• Grabación de vídeo Full HD (1080p) a 30, 25 y 24 fps

• WiFi y GPS incorporado al cuerpo de la cámara

Diseño y ergonomía

El primer punto que te llama la atención cuando tienes esta nueva 6D en las manos es su tamaño. El tamaño del cuerpo es algo más pequeño de lo habitual para lo que estamos acostumbrados en este tipo de cámaras del segmento pro de Canon. Es cierto que al saber que tiene un sensor tan grande lo primero que te imaginas es que su tamaño será como mínimo igual que el de una Canon 7D, pero su tamaño es incluso algo menor.

Pero que no nos engañen los tamaños, esta nueva 6D tiene una terminación robusta y muy parecida a las cámaras de la serie pro (es cierto que no hablamos del mismo sellado que de ellas). Su agarre es muy bueno, y a pesar de reducir el tamaño y dejarlo muy cercano al de una 60D, no desmerece nada su empuñadura y sus acabados.

En el apartado de botonería hay que decir que no se aprecian espectaculares novedades con respecto a lo que podemos encontrar en las gamas de Canon (si hablamos ya de la nueva 5D MarkIII), salvo cosas puntuales como la falta del stick. Por lo demás encontramos prácticamente los mismos botones y diales, los cuales se encuentran bien posicionados y todos ellos en los lugares donde estamos acostumbrados a encontrarlos dentro de esta marca.

La cámara dispone de una ranura para tarjetas SD en su lado derecho, y salidas de micro, HDMI y USB en el lado izquierdo junto con la del disparador. Como podéis observar un acierto lo de la incorporación de la salida de micro, a pesar de que no sea una de las mejores cámaras para grabar vídeo.

La batería usada es la LP-E6, la misma que lleva la 5D Mark III, 5D MarkII y 7D. Y al igual que todas estas no dispone de flash retráctil (cosa que suele usar Canon para diferenciar a sus cámaras del segmento cosumer del pro)

Finalmente la pantalla, que deja patente que el nuevo diseño antireflejos se nota; aunque es cierto que no de una manera increíble que solucione los mismos en todas las situaciones y desde todos los ángulos.

Fotografiando con la Canon EOS 6D

La verdad es que, la Canon 6D es una cámara que a pesar de su tamaño parece que su centro de gravedad no resiente demasiado al montarle ópticas de cierta envergadura; aunque cuando se le monta un 70-200 f2,8 el conjunto queda ligeramente "extraño".

El agarre, como comente antes, es bastante bueno y a la hora de disparar con ella no se nota en exceso su tamaño.

Dentro de los modos de disparo la cámara lleva incluida algunas opciones de cámaras del sector consumer (Canon 60D etc...), pero no restan absoluto un excelente comportamiento de la cámara para un uso más profesional. De hecho, los menús de la cámara son muy extensos y con muchas opciones, incorporando la posibilidad de compensar el WB o incluso disponiendo de un menú propio para el enfoque como ocurre en la 5D MarkIII (aunque no tan extenso).

La inclusión de nuevas opciones más profesionales en esta cámara, como la compensación de exposición hasta +-5, la hacen a mi juicio un excelente cuerpo para las personas que realicen trabajos profesionales un sus inicios, y sin duda un segundo cuerpo. Aunque una de las opciones que pueden hacer diferente a esta cámara a la hora de fotografiar con respecto a las otras DSLR de Canon es el Wi-Fi incorporado en el cuerpo (luego analizaré un poco está opción).

Además de esto, las opciones de HDR y Exposición múltiple me parecen muy interesantes; pero bajo mi punto de vista, demasiado automáticas para que puedan ser útiles en el ámbito profesional, a pesar de su buen funcionamiento.

La cámara me la dejaron con un 24-105 f4 L, pero yo he realizado pruebas con todo tipo de objetivos (sobre todo con los que suelo trabajar). Desde fijos como el 100 Macro L, hasta zooms como el 70-200 f2,8, y puedo decir que la cámara responde espectacularmente bien en calidad de imagen con objetivos de calidad aceptable. Parece que la densidad del sensor se comporta bien con lentes de gran definición en el centro y esquinas (aunque todo esto requiere de un análisis más extenso y concreto en función de cada lente).

El autoenfoque es bastante decente, y si alguna persona dispone de una 5D MarkII se dará cuenta que esta cámara está a años luz del enfoque de la misma (cosa no muy difícil todo sea dicho de paso).A pesar de todo, no es ni por asomo mejor que el enfoque de la nueva 5D MarkIII, y es que si se nota los solo 11 puntos de enfoque con respecto a los 61. El enfoque por seguimiento funciona muy bien, y todas las opciones personalizables del mismo van a hacer que los resultados mejoren a medida que se le coge el tranquillo.

Calidad de imagen, el punto más notable

Cuando tuve por primera vez en las manos la cámara pensé que, a pesar de ser un sensor FF, era muy difícil conseguir que la imagen fuera lo suficientemente buena como para plantearla como primer cuerpo para gente que se dedique a la fotografía, pero al cabo de unos pocos disparos mis dudas se despejaron.

A parte del buen hacer del AF (que ya comenté antes), la imagen es muy muy buena, llegando a colocarla muy cercana a su hermana mayor la nueva 5D MarkIII. Como vais a poder ver, se comporta genial a ISOS altos, y aunque a mi juicio sigue fallando un poquito el WB automático calideciendo un poco la imagen, tanto el ruido como el rango dinámico ha mejorado mucho a los antiguos sensores FF de la marca.

No hay duda que en este campo, Canon ha conseguido una cámara "barata" con un rendimiento de imagen sobresaliente.

El rango dinámico es bastante bueno (unos 12 stops), aunque tengo que reconocer que en determinadas tomas se me queda un poco escaso si lo comparamos con la competencia directa. Eso si, no ocurre lo mismo con el ruido.

Realicé tomas de todo tipo desde fotografía de reportaje, hasta alguna fotografía de estudio gracias a mis amigos y compañeros de Puerta 6 Studio, y debo decir que la cámara es muy polivalente como podéis observar.

Conectividad Wi-Fi y GPS, armas secundarias

Punto más que a favor de Canon en la inclusión de estas opciones; al menos el de la Wi-Fi. A pesar de todo, bajo mi punto de vista, tras probarlo creo que necesita mejorar un poco. La idea es tremendamente buena y útil, pero hace falta pulirla en cuanto a su funcionamiento.

La cámara permite conectarse a un smartphone, a una televisión, ordenador, una impresora o a internet (YouTube por ejemplo). Un acierto, ya que el poder visualizar las tomas desde un smartphone (por ejemplo) o disparar a a través de él, consiguen una polivalencia en las tomas, más que palpable, no vista hasta entonces en ninguna DSLR (si incluida en muchas CSC ahora). Esta opción es la que veo más novedosa, pues el poder visualizar imágenes en el smarthpone ya era posible transmitiéndolas por medio de una tarjeta Eye-Fi, pero no así el poder ver en la pantalla de tus dispositivos el Live View de la misma, poder cambiar los parámetros y disparar.

Todo esto se hace a través de una aplicación (en el caso del smartphone) y por medio del software de la cámara en el ordenador. Un buen punto para Canon, pues es una opción con verdaderas utilidades dentro del sector profesional; aunque debo mencionar que el punto que debe mejorar es esta aplicación, la cual me ha parecido considerablemente lenta y hasta a veces desesperante.

Como os muestro, yo usé la cámara para capturar algún detalle en fotografía callejera, otra de las opciones en la que podemos usar esta función.

En el tema del GPS, la cámara goelocaliza bien las tomas, para después poderlas organizarlas bien en nuestro gestor de imágenes. La verdad es que no tiene tampoco mucho misterio esta opción. Útil si la necesitas pero que no da más que lo es.

Ambas opciones, hay que mencionar que, teniéndolas encendidas consumen una cantidad considerable de batería de la cámara, que a pesar de disponer de una autonomía grande puedes convertirse en ínfima si no cuidamos este detalle.

Vídeo, una pequeña decepción

Y es que tras la excelente calidad de imagen que demuestra este sensor a la hora de fotografiar no es capaz de dar las misma posibilidades en la grabación de vídeo. Ojo, no quiere decir que su grabación sea mediocre, en absoluto, pero si vemos un sensor que se comporta tan parecido, fotográficamente hablando, al de la 5D MarkIII, es de extrañar que en determinadas situaciones de grabación se resienta.

Sin ir más lejos, el moiré es muy muy acusado en esta nueva 6D, y obviamente es un factor más que importante. Su grabación es digna, pero decepciona en cuanto al dinero pagado por una cámara de semejantes posibilidades, sobre todo comparándola. Otro punto importante se centra en su ranura de tarjeta de memoria SD, que a pesar de usar el protocolo UHS-1 no deja de ser algo flojo en cuanto a velocidad si lo comparamos con los actuales UDMA de las CF; y es que ya se sabe en vídeo la velocidad de transferencia si que importa, y mucho.

Muchas personas pueden pensar que no es una cámara realizada para estos menesteres, y obviamente no les voy a quitar razón, pero a pesar de todo hay que mencionarlo, ya que considero un punto a tener en cuenta, pues tengo por seguro que habrá personas que la querrán también usar para la grabación. De todos modos, y como resumen, comentar que su rendimiento de grabación es aceptable pero más cercano al de cámaras de una gama pro-sumer.

Ante todo decir que mi prueba de vídeo no ha podido ser tampoco muy exhaustiva, vaya dicho por delante.

Conclusiones y valoración

Como usuario de Canon, y pudiendo haberla comparado bien con varios modelos de la marca, comentar que la cámara me ha gustado bastante. Ofrece una calidad de imagen más que destacable consiguiendo por fin mejorar todos los problemas de los que lo usuarios nos hemos quejado en estos últimos años, como el ruido y la calidad de imagen. El enfoque ha mejorado, a pesar de no ser el mejor del mercado obviamente, y la opción Wi-Fi integrada son dos puntos muy a tener en cuenta.

A pesar de todo, la cámara tiene unos pequeños detalles que mejorar como son el vídeo y las aplicaciones Wi-Fi (al igual que la autonomía con ellas). Otra pega más es el precio, que hay que reconocer que aunque sea una cámara más barata que la 5D Mark III, se me antoja un poquito cara aún (en torno a los 2000€) para alguien que quiera introducirse en el FF; aunque también puedo entender que visto los resultados que da, es posible que vaya más encaminada al sector profesional que al amateur, sobre todo dejando patente su calidad con ópticas decentes.

En definitiva, una cámara excelente en términos generales que puede hacer que Canon pueda reflotar un poco dentro del terreno de las DSLR. Veremos si es así, pues la competencia de la D600 de Nikon no lo va a poner nada fácil, pues para mi aún está un pasito por delante.

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