BenQ ha revolucionado el mercado de los monitores profesionales de fotografía. Hasta su entrada en este apartado, los aficionados tenían que mirar con cara de deseo los caros monitores de marcas consagradas. El BenQ SW270C es un monitor profesional con un panel IPS de 27", con una resolución 2K y el 99% de cobertura del espacio de color Adobe RGB. Vamos a verlo.
Un monitor de 27" cambia la percepción de nuestras fotografías. Es un tamaño considerable. No cabe en muchos escritorios. Pero no queda más remedio que aceptar que es lo mejor que podemos hacer por nosotros. Con un monitor así, tenemos la posibilidad de dividir la pantalla en dos y tener en la parte izquierda Adobe Photoshop y en la derecha un editor de textos, por ejemplo. O un vídeo tutorial y seguir los pasos sin problemas.
Otro tema es la calidad de imagen. No es 4K, solo tiene 2560x1440 píxeles, pero sigo pensando que es más que suficiente para los fotógrafos. Para vídeo es otra historia. Pero los fotógrafos no necesitamos semejante resolución para ver nuestros archivos con claridad. Lo mejor para nosotros es la reproducción del color. Todo cambia. Todo es distinto, sobre todo si vienes de un portátil o de un monitor de supermercado.
Es un monitor de la serie SW para fotógrafos, frente a las series PD para diseñadores y la PV para el mundo del vídeo. Esto garantiza el 99% de Adobe RGB, el Delta E <2, la uniformidad de la pantalla y la posibilidad de calibrarlo por hardware para evitar sobrecargar a la tarjeta gráfica.
Además, como iremos viendo, estamos ante un producto que no tiene nada, absolutamente nada que envidiar a los monitores profesionales más caros. Los acabados, las conexiones, el diseño, siguen la misma línea de calidad que todos esperamos en un producto de estas características. Si tenemos un equipo fotográfico de última generación, este debería ser nuestro monitor.
Características del monitor BenQ SW270C
¿Hemos dicho ya que es un monitor profesional? Algunos recordarán el BenQ SW271, otro modelo muy interesante de la marca. Pero la única diferencia con él es que ahora tenemos un monitor 2K frente a un 4K. En los demás aspectos prácticamente coincide punto por punto. Pero vamos a ver las características para hacernos una idea de lo que tenemos entre manos.
Tamaño de pantalla | 27" |
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Proporción de aspecto | 16:9 |
Resolución (max.) | 2560x1440 |
Brillo | 300 |
Tipo de Panel | IPS |
Frecuencia de actualización vertical | 60 Hz |
PPP | 109 |
Gama de Color | 99% Adobe RGB, 97% P3, 100% sRGB |
Color Bit | 10 bits |
Salidas y entradas | 2xHDMI v2.0, DisplayPort v1.4, 3xUSB 3.1, 1xMini USB, Lector de tarjetas SD |
Cables incluidos | DisplayPort (1,8 m), USB 3.1 (1,8 m) |
Giro (Izquierda/ Derecha) | 45º/45º |
Inclinación (Arriba/Abajo) | -5º/-20ª |
Pivot | |
Calibración | 90º |
Dimensiones sin viseras (mm) | 504,5-611x613,8x213,4 mm |
Peso bruto (kg) | 18,4 kg |
Precio | 799€ |
Este monitor tiene además una tecnología de retroiluminación de LED, un contraste (según fabricante) de 1:1000, la posibilidad de reproducir HDR mediante HDR10. Y como no podía ser menos en este tipo de monitores permite trabajar con una LUT de 16 bits y viene con una desviación de Delta E<2... Estás características son difíciles de entender para un novato de la materia. Pero los fotógrafos más técnicos se sorprenderán gratamente al leerlas.
Diseño y ergonomía
BenQ ha acertado con el diseño de sus monitores. Y poco a poco va ajustando para ajustarse a las modas o las peticiones de los consumidores. Con ver el diseño de la peana y la columna en una tienda seremos capaces de distinguir la marca. Tiene ya personalidad propia. Líneas sencillas y sobrias. Sin estridencias y sin el color blanco tan poco apropiado para ver una fotografía.
Al ver las dimensiones de la caja nos podemos asustar por el tamaño. Y llegar a pensar que el montaje es harto complicado. Pero nada más lejos de la realidad. Solo tenemos que unir la peana a la columna con su característico agujero para los cables y el panel; después apoyarlo en una mesa y encajar ambos elementos con un sonoro clic. Ya está. Nada más sencillo y efectivo. Recuerdo la de tornillos que teníamos que fijar en otros monitores...
Las dimensiones de la pantalla de 27" son abrumadoras. En pocos escritorios de casas pequeñas podrá entrar. Pero una vez que te acostumbras, y es rápido, no querrás otra para trabajar. Yo he tenido que volver a mis dos pequeños monitores y es horrible. Me da la sensación de estar trabajando con un portátil.
Con este tamaño ya podríamos prescindir de tener dos monitores para trabajar. Entra todo. Y sobre todo es el tamaño justo para no tener que mover la cabeza en un escritorio a una distancia normal (70 cm). En este sentido es perfecta. Eso sí, con otro monitor de apoyo estaremos más cómodos.
Respecto al tema de la botonera en esta ocasión han optado por botones cuadrados, que sobresalen del marco. Unos dirán que no son los mejores porque cualquiera los puede tocar por equivocación. Pero la disposición de los menús hace que sea imposible cambiar el brillo sin darse cuenta.
Y tenemos también el cómodo mando a distancia Hotkey Puck G2 para acceder rápidamente a las funciones que queramos gracias a la programación. Así evitamos tocar la botonera del marco y solo tenemos que hacer clic en la base de la peana donde se coloca.
A pesar de las dimensiones del panel es muy cómodo de colocar y ajustar según los parámetros de la ergonomía para evitar dolores de cuello y espalda. He visto a mucha gente con la pantalla a su izquierda o a su derecha y visitar al cabo de los meses al fisioterapeuta. Lo mejor es colocarlo en frente de nosotros para aprovechar todas sus virtudes y no terminar con mareos.
Manejo y prestaciones
El BenQ SW270C cumple con una serie de estándares que permite trabajar con él y estar seguros de ver el color real. Con el apoyo del ICC (Consorcio Internacional del Color) y la ISO (Organización Internacional de Normalización) han creado la tecnología AqColor que permite controlar la corrección de gama y la gama de colores, el ajuste de la temperatura de color y ajustar con precisión la compensación de uniformidad de esquina a esquina del monitor.
¿Esto en qué se traduce? Para empezar, cuando abrimos la caja, encontramos una garantía que nos informa de la calibración precisa de fábrica para asegurarnos que todo está conforme a las normas. Así podemos empezar a ajustar nuestro monitor con los calibradores de X-Rite y Datacolor de última generación con la seguridad de no tener que hacer excesivos cambios.
Otra ventaja que hemos señalado antes es la posibilidad de calibrar por hardware, con la ayuda del programa Palette Master Elements. Conectamos el monitor al ordenador por USB y así establecemos una relación directa entre los tres componentes: monitor, ordenador y calibrador.
Gracias a esta característica, que creo recordar estrenó Eizo, tenemos la posibilidad de instalar la famosa LUT y ajustar con suma precisión todo lo relacionado con el color. No es difícil, pero es largo y laborioso. Y exige, al menos la primera vez, ajustar bien todas las ventanas del programa para lograr un monitor con una respuesta perfecta.
La particularidad de este modelo, común a toda la gama, es que podemos ver nuestras fotografías bajo diferentes aspectos como Adobe RGB, sRGB, Blanco y negro, Rec 709... sinceramente yo solo he trabajado con el primero. No he tenido la necesidad de cambiar. Pero imagino que otros fotógrafos querrán ver sus vídeos de la forma más fidedigna posible.
Y tiene de serie las viseras que permiten aislar la pantalla de los brillos y reflejos de la habitación y de los cambios bruscos de iluminación. Es un accesorio perfecto que deberían llevar todos los monitores del mercado. Pero solo en algunos vienen en la misma caja que el monitor, como una parte importante del mismo.
BenQ SW270C, la opinión de Xataka Foto
Puedo decir que este monitor de 27" es uno de los más interesantes del mercado por su relación calidad/precio. El tamaño puede imponer, la resolución 2K puede resultar insuficiente si trabajamos con vídeos. Pero para los que nos dedicamos a la fotografía es una de las mejores compras que podemos hacer.
BenQ ha revolucionado este mercado. Hasta su aparición era exclusivo para los fotógrafos que manejaban grandes presupuestos
BenQ ha revolucionado este mercado. Hasta su aparición era exclusivo para los fotógrafos que manejaban grandes presupuestos. Ha provocado que las marcas clásicas bajen de precios sus modelos más populares para competir con ellos. Y es una buena noticia. Ya no es tan caro producir paneles de calidad fotográfica y todos tenemos derecho a ver nuestras imágenes de la mejor forma posible.
Este monitor se convierte en un pilar de nuestro flujo de trabajo. Si lo calibramos bien, y entendemos todo lo que permite hacer, estaremos seguros de ver las fotografías como son realmente y lograremos hacer revelados mucho mejores. El color será preciso y la reproducción de las luces y las sombras serán perfectas.
No tiene sentido tener el mejor objetivo del mercado con la cámara más avanzada y no tener un monitor profesional. Nadie dijo que esta profesión/afición fuera barata. Pero gracias al precio que tiene el Benq SW270C no dejaremos de comer demasiado tiempo. Y para el profesional es un precio sin precedentes. No es barato pero los 799€ que cuesta están lejos de los 2000€ que teníamos que pagar antes por monitores similares.
¿Todos los fotógrafos necesitamos este tipo de monitor? Yo pienso que si te gusta lo que haces es imprescindible, tanto o más que una cámara de última generación. Es el eslabón perfecto para lograr una buena impresión. Seguro que muchos estáis contentos con la pantalla del portátil pero este monitor de BenQ permite jugar en otra liga.
9.2
A favor
- Calidad de imagen
- relación calidad/precio
- Calibración por hardware
- Reproducción del color
En contra
- No viene con cable HDMI de serie
- Para algunos puede ser un problema ser 2K
El monitor ha sido cedido para el análisis por parte de BenQ. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.
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