Una de las sorpresas del verano es la nueva Sony RX100 VII. Otra cámara que todavía no se esperaba nadie pero que sorprendió a todos a pesar de conocerla el mismo día de la presentación de la Sony A7R IV. Estamos ante una cámara compacta, con sensor de 1 pulgada, con las características y cualidades de la Sony A9.
Se presentó a la prensa especializada en Dublín, después del impacto de la nueva Sony A7R IV. Parecía algo secundario, una mera actualización para el verano. Pero desde Sony remarcaron que estábamos ante una versión en miniatura de la Sony A9, la cámara profesional de la casa.
En su pequeño cuerpo alberga toda la tecnología que ya conocemos pero con el clásico sensor CMOS de 1" de la serie RX. Pero con la arquitectura de la Sony A9. Con todo lo que esto supone. Sus características principales lo dejan claro, como podemos ver a continuación:
- Sensor CMOS Exmor RS de 1" de 20,1 MP con el mismo procesador Bionz X de las últimas A7 y A9.
- El sistema de enfoque es idéntico al de la Sony A9. Más de 60 cálculos por segundo para el sistema de enfoque híbrido con 357 puntos de detección de fase que cubren el 68% de la superficie del sensor.
- 20 fps sin pérdida de visión en el visor, el temido blackout.
- Real time tracking y Real time Eye-Af para fotografía y vídeo.
- Confirmación de enfoque en apenas 0,02 sg frente a los 0,03 sg de la generación anterior.
Grabación de vídeo en 4K con el mismo sistema de estabilización que sus hermanas mayores.
Sensor
Sensor CMOS Exmor RS® tipo 1.0 (13,2 x 8,8 mm), relación de aspecto 3:2 de 20,1 MP
Objetivo
Objetivo ZEISS® Vario-Sonnar T* 24-200 f2,8-4,5
Pantalla
7,5 cm (tipo 3.0) (4:3) / 921 600 puntos / Xtra Fine / LCD TFT
Visor
Visor electrónico de tipo 0,39 (OLED), 2.359.296 puntos
Sensibilidad
100-12.800 ISO
Flash
Flash emergente manual integrado
Formato de grabación (audio y vídeo)
XAVC S: LPCM 2 canales, AVCHD: Dolby Digital (AC-3) 2 canales (Dolby Digital Stereo Creator)
Terminales de entrada y salida
Terminal multi/micro USB13, USB de alta velocidad (USB 2.0), micro HDMI, conector de micrófono (miniconector estéreo de 3,5 mm)
Batería
NP-BX1 (240 disparos aprox)
Tamaño y peso
101,6 x 58,1 x 42,8 mm y 302 g
Precio
1300€
Todas estas características son novedad en este modelo. Y repite algunas de las generaciones anteriores, como el objetivo 24-200 f2,8-4,5 ZEISS Vario Sonar T de la RX100 VI, el visor extraíble firmado por ZEISS (presente desde la versión IV) o el obturador electrónico que llega hasta 1/32000.
Es una forma, relativamente económica, de tener las virtudes de las cámaras profesionales en el bolsillo de nuestra mochila o incluso de nuestro pantalón. Porque como todos sabemos, es un cuerpo realmente pequeño que entra en el ceñido bolsillo de un vaquero.
Diseño y ergonomía de la Sony RX100 VII
Todavía recuerdo la presentación de la primera RX100. Estaba en otro medio y me llamó mucho la atención. Lamentaba la falta de visor pero todo lo demás dejaba claro que estábamos ante una gama premium, como les gusta decir ahora. Y fue la respuesta a la invasión de los teléfonos móviles que casi supone la extinción de las compactas.
Este tipo de modelos es la única salvación para las compactas. Y Sony ha ido mejorando la idea hasta alcanzar la que se presenta hoy. Poco a poco iba ganando en calidad de imagen, rango dinámico, más rango focal... Pero el diseño de las RX100 no ha cambiado en esencia. No es tan minimalista como otras cámaras de la competencia.
Hace tiempo pusieron el visor. En este caso sigue y, como ocurre con el modelo anterior, es operativo en un solo paso, desde el momento que se activa. Poco más ha cambiado, si acaso la nueva entrada estándar para un micrófono.
Es muy pequeña. Se podría manejar con una sola mano a costa de una estabilidad peor. Eso sí, contamos con SteadyShot de 4 pasos. Pero aunque tengamos las manos grandes, podemos sujetarla con firmeza. Una para el objetivo y su anillo multifunción y la otra para sujetar el cuerpo y disparar, como hacemos con máquinas más grandes.
Y como hemos comentado antes, podemos meterla en cualquier bolsillo sin miedo a reventar los pantalones. Eso sí, aunque la estuvimos probando sin correa, da miedo llevar un equipo de semejante precio sin sujeción extra... En el fondo es como llevar un móvil de gama alta. Pero este no tiene tantas partes móviles como la pantalla o el objetivo. La pantalla, por cierto, se inclina hacia arriba 180° y hacia abajo 90°.
Toma de contacto y muestras de la Sony RX100 VII
Como siempre ocurre con estas novedades, no podemos leer los archivos RAW todavía. Una pena. Pero después de ver los jpeg directos de la cámara puedo decir que me han dejado una sensación positiva. No hemos podido hacer pruebas exhaustivas. Pero sí nos hemos hecho una idea de lo que puede llegar a ser.
Como podéis ver en las muestras, la calidad general es muy alta. En los recortes al 100% de la fotografía de la modelo podemos ver sin problemas hasta el último poro con un ISO 800. No alcanza la calidad del formato completo, y el jpeg deja ver sus límites. Pero tenemos una fotografía que puede ser publicada en cualquier medio.
El menú sigue siendo Sony 100%. Es decir, sigue siendo complicado. Pero los que tienen alguno de los modelos actuales se sentirá como en casa. Hay tantas configuraciones posibles, tantas cosas para elegir que el usuario medio se sentirá perdido. Pero como tengas una sin espejo de la marca no tendrás problema alguno en sacar lo mejor de ella.
¿Sería tan difícil tener ajustes preestablecidos? Hubo un modelo de Canon hace mucho tiempo que tenía un lector y el fotógrafo solo tenía que indicar lo que quería hacer y listo. Entonces no tenía sentido pero hoy en día sería estupendo tener una aplicación en el móvil para descargar configuraciones...
Salir con esta cámara es perfecto para los que cargamos con equipos más grandes. Al principio nos sentiremos perdidos. Pero después de un tiempo se puede convertir en nuestra cámara principal para el día a día o las vacaciones.
El enfoque es tan rápido como en los equipos profesionales. El cuadrado verde aparece enseguida enganchado en los ojos de los modelos (Eye-AF en tiempo real). El enfoque continuo no abandona al animal que quieres retratar. De verdad que no deja de sorprender ver tanta eficacia y rapidez en un equipo tan pequeño.
Todo es muy pequeño pero si ponemos la cámara en Programa, incluso en Prioridad al diafragma no tenemos que estar tocando muchos botones. El anillo del objetivo lo podemos configurar para la Compensación de exposición o para cambiar el diafragma. Y no necesitamos nada más. En este sentido es muy ágil. Es una cámara para divertirse. Esa es la clave de la Sony RX100 VII. Un juguete caro que bien utilizado se puede convertir en una herramienta profesional.
Es una cámara para divertirse. Esa es la clave de la **Sony RX100 VII**. Un juguete caro que bien utilizado se puede convertir en una herramienta profesional.
La conclusión de Xataka Foto
Esta cámara merecía una presentación aparte. No tiene sentido que esté a la sombra de los gigantes. Es una demostración de dónde puede llegar la tecnología. Y que todo es posible por apenas 1300€. Ahora mismo se convierte en el modelo de referencia dentro de las compactas.
Quizás no necesitamos tanto. Es verdad que tenemos mucho donde elegir en la competencia. Desde Ricoh a Canon. El sensor de 1" es suficiente para la mayoría de los aficionados. Es la cámara para el día a día, que permite hacer buenas fotografías y grabar vídeos perfectos para el mundo de los vloggers.
No ha dejado de llamarnos la atención que funcione como una Sony A9. No es solo publicidad, sino que en las horas que hemos podido utilizarla hemos tenido la sensación de poder conseguir cualquier fotografía. Por un lado es maravilloso, pero por otro da miedo lo fácil que puede llegar a ser todo.
Un tema que no hemos podido comprobar es la duración de las baterías. Semejante torrente de información tiene que pasar factura a la pequeña batería de esta gama. Apenas estuvimos una hora con ella en total y al menos no se encendió la señal de alarma.
Personalmente soy muy reticente a un objetivo zoom de semejante rango focal y con una luminosidad tan justa en el extremo. Prefiero el objetivo que llevan la versión III, IV y V. Un clásico 24-70 f1,8-2,8. Pero entiendo que el 24-200 sea más tentador para la mayoría.
Por 1300€ tenemos en la mano una cámara compacta de gama premium que hace exactamente lo que buscamos en cámaras profesionales. No es en absoluto barata. De hecho es la más cara de las últimas máquinas que se han presentado en este segmento. Lo mejor de todo es que las demás versiones de la RX100 siguen a la venta. Y bajarán de precio seguro. La Sony RX100 VII hace fotografías bonitas como sus hermanas mayores. Solo necesita que tú hagas buenas fotografías. Y eso es un reto.
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