Cada vez estamos más cerca de un mundo en el que las máquinas harán todo por nosotros. La ciencia ficción se convierte en realidad y las películas futuristas seguro que terminarán cambiando de género. Los nuevos sensores IMX500 y IMX501 permitirán hacer cosas impensables hace cinco años gracias a la IA que tienen incorporada. Y la imagen fotográfica cambiará para siempre.
Muchas de las cosas que permitirán esta nueva tecnología de Sony no podemos ni imaginarlas siquiera porque nos cuesta entenderlas. Puede que en un principio no le veamos ninguna aplicación útil en la fotografía. Pero cuando entendamos lo que tenemos entre las manos nos daremos cuenta de que el futuro ya está aquí. En unos sensores de 1/2,3 (más pequeño que los Micro Cuatro Tercios) con 12,3 MP.
La novedad de estos sensores retroiluminados es que tienen IA (inteligencia artificial) integrada en sus circuitos. Por primera vez unos sensores de imagen consiguen que los dispositivos de los que forman parte no se tengan que conectar con internet para funcionar correctamente. Hasta ahora era necesario acceder a Internet para enviar la información que recogen a los servidores en los que reside la inteligencia artificial... solo tenemos que pensar en Alexa, Google Assistant, Siri...
Sensores de fotografía con inteligencia artificial
Estos nuevos sensores, de pequeño tamaño, están listos para incorporarse a todos los dispositivos que podamos imaginar. No podemos olvidar que la fotografía digital -todo lo digital- no es más que una sucesión de números. Ahora habrá más números. Datos de imagen a los que se sumara todo tipo de información.
Estamos hablando de analizar toda la información que reciben y señalar quién lleva mascarilla o no en el entorno que está viendo... Descubrir lo que está comprando el cliente en tiempo real... ver quién entra y quién sale en cada momento de cualquier lugar. Y todo sin saturar la nube porque los datos los genera el propio sensor.
Encima se preocupan por la privacidad de los usuarios. Ya no van a recoger datos que delaten quiénes somos,sino metadatos útiles para la estadística. Como señalan en la nota de prensa:
El sensor produce metadatos (información semántica perteneciente a los datos de la imagen) en lugar de información de la imagen, lo que permite reducir el volumen de los datos y abordar las preocupaciones sobre la privacidad.
Puede que todo esto parezca ajeno a lo que realmente nos importa, que es la fotografía. Esta nueva forma de trabajar permitirá mejorar el sistema de enfoque automático de las cámaras actuales. O reconocer a una persona en una boda y seguirla automáticamente durante toda la fiesta. Imaginaos lo cómodo que resultará mantener enfocada siempre a la novia y predecir en todo momento cuál es la exposición óptima para evitar que se queme su vestido. Todo dependerá de la imaginación del fabricante y del usuario...
Estos nuevos sensores, con matriz Bayer, son pequeños pero permiten grabar en 4k a 60 fps y a 1080 a 240 fps. El único problema que vemos es el elevado consumo de energía para procesar toda la información. Es verdad que aligera de trabajo a la nube, pero exigirá una nueva generación de baterías. Igual no somos muy visionarios en este aspecto pero...
Entramos en una nueva dimensión a la hora de hablar de sensores. La información de cada fotograma de vídeo y de cada fotografía se procesará en solo 33 ms. Todo volverá a cambiar, otra vez. ¿Pero mejorarán nuestras fotografías o solo tendremos acceso a más información?
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