El 19 de agosto fue el día de la fotografía. Felicidades queridos fotógrafos. A pesar de todo tenemos mucho que celebrar. Es el día de la luz. Y todos podríamos recordar por qué salimos siempre con una cámara al hombro.
Como ya hemos señalado en otras ocasiones, el día de la fotografía se celebra el 19 de agosto de 1839 porque fue el día en el que el gobierno francés presentó al mundo la compra de la patente del daguerrotipo al socio de Nicephore Niepce, Louis-Jacques-Mandé Daguerre.
Las historias que se pueden contar sobre la relación de ambos inventores daría para una película de trama intensa. Para resumir podríamos decir que Niepce era el inventor recluido en su laboratorio y Daguerre el hombre expansivo que buscaba un negocio seguro después del incendio de su espectáculo visual, el famoso diorama que con su realismo confundía hasta a los reyes que tiraban monedas de oro para comprobar que aquello no era cierto.
Niepce desarrolló todo el invento. En junio de 1826 consiguió, en una placa de 16x20, la primera imagen fijada del tejado de su casa en Le Gras desde su habitación. Todo un logro después de ocho horas de exposición. La primera fotografía... hay un cálculo que dice que cada minuto se toman tantas fotografías como las que se hicieron en el siglo XIX.
El problema es que Niepce, que creó la fotografía porque no sabía pintar, murió en 1833. Y Daguerre vio la puerta abierta. En 1835 pudo modificar el contrato que tenía firmado con su socio por los problemas económicos del hijo de este. Así pasa a ser el primero en la lista, dejando en segundo lugar la memoria del difunto burgués. Después de perfeccionar la técnica (algo que hay que reconocerle) por culpa de un olvido, llamó al resultado de la investigación común daguerrotipo, para que quedara claro quién era él.
La fotografía en nuestras vidas
Lo que no sabían estos dos señores es que lo que habían inventado iba a cambiar el mundo. Que el siglo XX iba a ser el siglo de la imagen. Que su trabajo iba a ser fundamental para documentar el paso del tiempo, para cambiar el curso de la historia, para terminar las guerras y para mostrar las cosas más atroces que es capaz de hacer el ser humano.
No sabían que la fotografía abandonaría la química pero que no podría olvidarse de la física de la luz. Que la luna cornata quedaría olvidada por los fríos unos y ceros de los sistemas binarios. Que una fotografía congelaría la velocidad de la luz mientras que ellos tenían que esperar horas y después minutos para lograr una imagen decente.
No podían ni imaginar que con una fotografía de una niña abrasada empezaría el final de una guerra y que con mil fotografías se puede demostrar que el hombre es un lobo para el hombre. Que con una sola fotografía nos podemos enamorar de lo que vemos y llevarnos a ese lugar con los ojos cerrados.
La fotografía es esto y mucho más. En las manos adecuadas es una obra de arte de la que todos aprendemos (por eso lo es). En otras ocasiones es una vergüenza que no debería mostrarse nunca, salvo para comprender que no todo vale. Muchos con una cámara en la mano tienen un don, mientras que la mayoría solo soñamos con tenerlo.
Por todos estos motivos merece la pena que cualquier día celebremos el día de la fotografía, aunque solo sea por dar las gracias a dos señores que fueron capaces de lograr algo que llevaba toda la humanidad intentando desde tiempos inmemorables.
En Xataka Foto| Hoy es el Día Mundial de la Fotografía ¡Feliz 177 cumpleaños!
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