Hoy se presenta el Profoto A1X, la segunda generación del flash que más ríos de tinta ha hecho correr en los corrillos fotográficos. Su precio siempre ha sido una de las polémicas; su cabezal redondo, otra. Por no mencionar si la luz queda es tan buena como dicen los que lo utilizan... El Profoto A1X mejora las prestaciones de su antecesor y por fin es compatible con el universo Sony.
El Profoto A1X presume de más de treinta mejoras respecto al original. Destacan una batería más potente, con una carga más rápida, compatibilidad con Sony... una serie de características que lo convierte en un flash profesional. Y desde luego, con la misma filosofía: la facilidad de uso ante todo y una fiabilidad fuera de toda duda.
Los datos que han facilitado en la nota de prensa son los siguientes:
- Nueva batería con 450 disparos a plena potencia en lugar de 350.
- Tiempo de reciclado más rápido: 1.0s en lugar de 1.2, gracias a la nueva batería.
- 20 canales en lugar de 8.
- Nueva interfaz de usuario más simple (similar a B10).
No podemos olvidar que esos 450 disparos son a plena potencia. Es decir, si bajamos un punto, el número de disparos se multiplica por dos. Ese tiempo de reciclado se refiere también a la recuperación del flash a plena potencia.
Con una sola batería muchos podemos cubrir una boda entera sin problemas. Un día entero trabajando con la seguridad de conseguir el mismo resultado del primer al último fogonazo. Sin cambios de temperatura de color ni disparos perdidos. Es el compromiso de Profoto a cambio de comprar un equipo bastante más caro que la competencia.
Las características principales del Profoto A1X
A todos los fotógrafos les llamó la atención la peculiar construcción del A1 original. Ese cabezal redondo, las baterías en lugar de pilas AA... Es verdad que no fueron los primeros. Que en el mercado encontramos antes otros modelos con cabezal redondo, incluso con batería. Pero al final este ha sido el modelo que ha terminado marcando tendencia y que empieza ser copiado (aunque lo mismo podrían decir los que hicieron el segundo flash de tipo cobra).
Todavía no lo hemos podido tener en las manos, ni mucho menos disfrutarlo en largas sesiones. Pero esperamos hacerlo pronto para confirmar las primeras impresiones y comprobar si sigue la misma senda que el anterior.
Dentro de esas treinta mejoras esperamos encontrar un interruptor mejorado, más duro, para elegir entre modo TTL o Manual, una pantalla con más idiomas que el inglés y que por fin (está confirmado) sea totalmente compatible con las cámaras Sony, algo muy demandado por los profesionales y usuarios avanzados.
No podemos olvidar que estamos ante un flash profesional. Su precio, del que hablaremos más adelante, es solo para los que puedan amortizarlo o sean capaces de apreciar la calidad de su luz. Quien lo compra busca fiabilidad y constancia.
Sus características principales son:
- Cabeza redonda con caída de luz suave y natural.
- AirTTL y HSS para capturar rápidamente imágenes profesionales.
- Montura magnética inteligente para herramientas de modelado de la luz.
- 5 herramientas dedicadas al modelado de luz.
- Luz de modelado flicker-free integrada.
- Air Remote TTL incorporado.
- Batería de ión de litio recargable y reemplazable.
- Tiempo de reciclado de 1.0s.
- Interruptor TTL/MAN.
- Construido con motor zoom integrado con control manual.
- Ayuda al enfoque automático (AF).
- Pantalla grande de alta resolución.
- Versiones a medida para Canon, Nikon y Sony.
Se puede colocar en la zapata de la cámara, pero como el pequeño flash de estudio que es, su lugar natural está fuera de la cámara, colocado en un trípode para ayudar a iluminar correctamente cualquier objeto que tengamos frente a nuestra cámara. La luz que proporciona es única (aunque no dudo que es algo relativo y que pondremos a prueba en un futuro análisis).
Y una de las cosas que más ha llamado la atención es su facilidad de manejo. En los tiempos en los que las cámaras son auténticos ordenadores este flash permite encenderlo y disparar inmediatamente sin problema alguno de funcionamiento.
El precio del Profoto A1X y el futuro inmediato del Profoto A1
Una buena noticia para muchos fotógrafos es que el A1 original no desaparece del mercado. Se mantiene con un nuevo precio que lo acerca a los flashes de la competencia. Ahora se puede adquirir por 635,54€ (+ IVA). Así, uno de los flashes más amados/odiados alcanza el mismo precio que los de Nikon, Canon o demás.
El nuevo Profoto A1X sale por 888,43€ (+IVA) para las cámaras Canon, Nikon o Sony. Si lo queremos con el disparador Connect costará 971,07€ (+ IVA).
Y seguro que pronto empezarán los comentarios acerca de la necesidad de gastarse tanto dinero en un flash. Si merece o no la pena. Si no tiene sentido... Próximamente haremos en Xataka Foto un análisis a fondo de este nuevo flash para ver dónde están sus límites, si es buena idea comprarlo o es solo una curiosa campaña de mercado. Se acercan nuevos tiempos para el mundo de la luz.
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