Oppo ha presentado un pequeño vídeo y una nota de prensa donde desgrana todas las innovaciones tecnológicas que van a implementar en sus móviles para conseguir imágenes profesionales. El mundo de la fotografía ha encontrado un filón en los smartphones y los avances más importantes están llegando por este lado: sensores RGBW, zoom óptico progresivo 85-200 mm, tecnología OIS de cinco ejes, cámaras debajo de las pantallas... El futuro ya está aquí.
La fotografía es móvil o no será; dependerá de la inteligencia artificial y permitirá dispositivos más pequeños y eficaces. Y por fin podrán decir que no todo depende del tamaño del sensor, sino de uso correcto de la tecnología para alcanzar la calidad de los equipos profesionales de toda la vida.
Los fotógrafos estamos atrapados por los cambios radicales que se están dando en este siglo XXI. Antes teníamos una cámara para toda la vida y ahora estamos obligados a cambiar cada dos años (como mucho) si queremos tener lo último. Lo que nos preocupa es que cada vez se habla más de tecnología y hacen creer que con apretar un botón las fotos salen perfectas. Pero esto es otro tema...
Oppo ha presentado hoy un vídeo en el que cuentan todo lo que va a llegar en los próximos años a sus móviles. Ya lo hemos adelantando al principio pero lo destacamos aquí:
- Cámaras debajo de la pantalla
- Sistema de estabilización de 5 ejes
- Telezoom óptico progresivo
- Sensor RGBW
Así que vamos a analizar cada novedad y ver el papel que jugará en un futuro dentro de la fotografía. Dos de estas novedades, el sistema de estabilización y el zoom óptico, están presentes en el mundo de la fotografía tradicional, dentro de las marcas de toda la vida. Lo llamativo es reducir su tamaño y conseguir meter esta tecnología dentro de un móvil. Las otras dos es un intento de adaptarse a algo tan poco fotográfico, en principio, como un teléfono móvil.
Cámaras debajo de la pantalla
La presencia de la cámara en la pantalla es una pesadilla para el diseño. Siempre hay que reservar un espacio para colocar el objetivo para los selfies. En algunos móviles optaron por integrarlo dentro de la pantalla o incluso apostaron por el famoso agujero que tan poco ha gustado.
La clave es esconderlo debajo de la pantalla sin perder calidad de imagen. Y sobre todo sin afectar al visionado. Este es el camino que han seguido en Oppo para lograrlo: aumentar la calidad de visualización de la pantalla a 400 ppp justo en la zona donde se situaría el objetivo.
Así logran que el brillo y el color de esa zona solo presente una desviación máxima del 2% respecto al resto de la pantalla. Es decir, no se notará dónde está la cámara y estéticamente el diseño será mucho más limpio.
Sistema de estabilización de 5 ejes
Esto es un alarde de miniaturización llevar a algo tan pequeño como un móvil un sistema de estabilización que encontramos por defecto en la mayoría de las cámaras sin espejo. El sistema de 5 ejes permite evitar la trepidación y ayuda a disparar con tiempos de obturación mucho más bajos, además de permitir ISOS más bajos para evitar el temido ruido.
Es un sistema combinado. Por un lado el sensor se desplaza para compensar el movimiento y las lentes del objetivo también. La idea es mover solo las lentes del objetivo cuando el movimiento es mínimo y activar la estabilización del sensor cuando la situación se complica. Muy parecido a lo que vemos en el mercado actual de las cámaras más grandes.
La gran duda es si este sistema, con un giroscopo y motores de rodamientos de bolas, será capaz de aguantar el día a día de un móvil en el bolsillo del cliente y cómo responderá con las caídas habituales que suelen tener los teléfonos... Hasta el primer trimestre de 2022 no lo veremos en acción
Telezoom óptico progresivo
Esto es un ejemplo magnífico de cómo reducir hasta lo impensable es posible. Y sobre todo si tenemos en cuenta el tamaño del sensor. No hemos visto por ningún lado qué tamaño tendrán los sensores futuros, pero son tan pequeños que no es necesario que el diámetro de las lentes sea muy grande. Y han logrado un impresionante 85-200 mm (equivalente).
Lo mejor de todo es que se olvidan del zoom digital, que no es más que un mero recorte por software con la pérdida de calidad y píxeles añadidas y se integra en el cuerpo del móvil la estructura interna de un teleobjetivo zoom donde hay varias lentes en grupos distintos que se mueven de forma independiente a través de un eje.
Es la mejor forma de conseguir la más alta calidad óptica. Pero de nuevo nos pueden entrar dudas sobre su durabilidad en un mundo tan hostil como es el uso diario de un teléfono.
Sensor RGBW
Estamos ante una de las novedades más llamativas y que tantos y tantos fabricantes han intentando mejorar una y otra vez. A la hora de captar la luz los sensores recogen la información RGB. Hay el doble de píxeles verdes que el de los demás. Y hasta ahora el ruido dependía del tamaño del píxel.
Para compensar el tamaño minúsculo del píxel de estos sensores, Oppo ha desarrolado el RGBW que añade píxeles que recogen el blanco (entendemos que la información de los tres canales a la vez o tal vez la luminosidad de la escena) para mejorar la señal un 60% y reducir el ruido un 35%.
Esto es solo una nota de prensa y es difícil comprobar el alcance real de la tecnología de aislamiento de píxeles DTI y el procesamiento DeepSi de este nuevo sensor. Además del problema añadido que pueden tener muchos programas a la hora de procesar toda esta información.
El futuro está aquí y nosotros solo podemos esperar a probarlo para ver cómo cambia la técnica digital a la hora de hacer algo tan complicado como una fotografía. Y no olvidemos nunca que la tecnología es fundamental pero nunca hará una buena fotografía por nosotros.