Alberto Schommer fue uno de los fotógrafos más importantes de las últimas décadas. Sus retratos psicológicos marcaron a la sociedad española de la Transición al colocar a los protagonistas de aquellos tiempos de cambio en situaciones surrealistas para escenificar su papel en la sociedad. RTVE estrena un documental de producción propia en el que redescubre la figura de un autor que lo fue todo en la fotografía española.
Alberto Schommer lo hacía todo en los tiempos pasados. Cuando ibas a una librería los únicos libros que encontrabas sobre fotografía eran los suyos... Durante algún tiempo en el Thyssen de Madrid solo tenían un libro de fotografía, el suyo sobre el museo (algo que me jorobó mucho porque yo quería hacer lo mismo). En 10 años publicó más de 13...
Pero el tiempo ha pasado. Y parece que muchos ya nos recuerdan quién fue uno de los fotógrafos más originales que hemos tenido nunca. Y por este motivo estamos obligados a ver el documental dirigido por Alicia de la Cruz y Chema de la Torre sobre el fotógrafo vasco de origen alemán. Seguro que muchos fotógrafos descubrirán otra forma de mirar.
‘No sonría. Alberto Schommer’, el documental que podemos ver en RTVE
Ya hemos hablado en otras ocasiones de Imprescindibles, una serie de documentales que nos cuentan la vida y obra de personajes importantes del mundo de la cultura. Chema Madoz es uno de los fotógrafos retratados en este programa, por ejemplo.
Pero hoy nos vamos a detener en la figura de un fotógrafo que tenía fama de duro, de exigente. El personaje que amabas u odiabas pero que dejó una obra que marcó a una generación. Hizo muchas cosas, algunas mejor que otras, pero siempre se le recordará por sus retratos psicológicos.
Este trabajo, que publicó en periódicos tan dispares como ABC o El país, simbolizaba el papel de diversos personajes durante la Transición española. No eran retratos con un fondo blanco a la manera de Richard Avedon que se inspiró en Goya. Schommer bebió de las fuentes del surrealismo para sacar a miembros de la iglesia católica levitando o a ministros con un bebé entre los brazos.
No podemos olvidar por supuesto otro pequeño documental sobre su figura en la serie La voz de la imagen, un proyecto apoyado por la Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte que decidió emprender este proyecto, y que está realizado por José Luis López Linares y Publio López Mondéjar.
Por supuesto no es lo único que hizo. Creo que ha sido el único que ha logrado fusionar la escultura con la fotografía con su serie Cascografias. Una serie única en la que retrataba a los modelos desde distintos ángulos, positivaba los papeles y los arrugaba para darles textura. Para terminar incluso las montaba para dar volumen al resultado.
Es un fotógrafo que lucho siempre por encontrar una forma de expresarse, por evolucionar en este mundo de la fotografía en el que muchos se quedan estancados cuando creen que han alcanzado la cima. Como él mismo dijo:
Hay dos tipos de artistas, los que hacen siempre la misma obra y los que cambian. Yo me definiría como un autor todo terreno que siempre ha estado insatisfecho con lo último que hacía y que de lo último que hacía sacaba consecuencias para hacer lo siguiente.
Todas estas cosas y muchas más se pueden ver en el documental que podemos ver ya en la página de RTVE. Ha contado con el acceso a los fondos fotográficos del Museo Centro de Arte Reina Sofía, Centro de Arte de Alcobendas o el Bellas Artes de Bilbao. No podemos olvidar que es uno de los pocos fotógrafos que tienen una calle dedicada en su ciudad natal. Una figura a reivindicar y que todos deberíamos conocer. Un buen documental para aprender.
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