En las próximas horas se espera el anuncio por parte de Nikon de la nueva D610, una cámara que viene a reflejar una serie de retoques en forma de pequeñas mejoras sobre la actual D600.
Según las especificaciones filtradas se trata básicamente de una actualización del modelo, y salvo sorpresa de última hora, las principales novedades respecto a su predecesora - por orden de importancia, a mi criterio - serán el nuevo sellado del cuerpo (como el de la D800) y el aumento de la ráfaga de 5,5 hasta 6 fps.
También será fabricada en Tailandia y, aunque inicialmente se creía que incorporaría GPS y Wi-Fi, parece que finalmente podría carecer de ambos. Esperamos tener confirmación (positiva) de esto, ya que de lo contrario nos quedaríamos prácticamente sin incentivos para elegir la D610 frente a la probablemente más barata D600.
¿Mejorará también en el conocido problema de aparición de manchas de aceite en el sensor de su actual hermana? Aprovechando que mejoran el mecanismo obturador, ¡ya podían de paso! ¿Nos alegrarán con alguna sorpresa inesperada? Lo sabremos muy pronto.
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