Así nos lo presentaba un responsable de Fujifilm Instax en una presentación de la que os dimos cuenta la semana pasada. Un acto en el que por cierto nos contaban que esta firma copa el 90% de la cuota de mercado español. Pero si hay una marca que se asocia con la foto instantánea esa es Polaroid. No en vano fue la inventora de la primera cámara de fotografía instantánea allá por 1948.
Claro que Polaroid no siempre ha tenido una buena salud, y de hecho no hace ni un año que cambió de manos haciéndose cargo de la compañía “The Impossible Project”, una suerte de aventura empresarial que buscar resucitar la empresa y tiene como cara a dos amantes de la fotografía (uno de ellos antiguo empleado de la empresa) y como respaldo a un grupo de inversores.
Pues bien, además de lanzar nuevos modelos, este proyecto está llevando a cabo numerosos actos para contribuir a esa puesta de moda de la foto instantánea que decíamos al principio, entre ellos la exposición ‘Instant Stories: Wim Wenders’ Polaroids’ que se está celebrando en una galería que The Impossible Project tiene en Londres.
El caso es que coincidiendo con la muestra, The Photographer's Gallery reunió la semana pasada a un grupo de científicos, creativos y pensadores para desvelar el complejo proceso que hay detrás de una fotografía instantánea analógica. Y es que, según cuentan, “crear una fotografía con película instantánea es en parte imaginación, en parte ciencia, más una pizca de suerte y mucha química, sobre todo mucha química”.
Tal y como se puso de manifiesto en la charla, la película instantánea (su nombre más exacto sería “película analógica instantánea”) no es solo película ya que se convierte automáticamente en una imagen fotográfica. Si lo pensamos, es cierto que prácticamente no hay otra situación en la que una lámina de plástico con productos químicos termine convertida en una imagen perfecta (o casi) delante de nuestros ojos y sin salir de la palma de nuestra mano. Algo que parece simple pero que lleva detrás un proceso francamente delicado. De hecho, según se comentó en el acto, “uno de los procesos químicos más complejos del planeta”.
¿De quién fue la idea?
Uno de los temas que se tocaron en la charla fue la discutida cuestión sobre a quién se le ocurrió la idea de la foto instantánea. Hay distintas versiones, pero la “favorita” de The Photographer's Gallery otorga este honor a Edwin Land, un ciéntifico conocido por haber inventado el filtro polarizador. Resulta que un buen día, estando de vacaciones allá por los años 30 del siglo pasado, le hizo una foto a su hija y ésta, con toda la inocencia de sus tres añitos, le preguntó que porqué no podía ver la foto ya.
De ahí surgió el reto de crear una cámara instantánea, así que se puso manos a la obra. Apenas cuatro años después de haber aceptado el desafío de su hija anunció su invención: un proceso en seco para revelar fotos aproximadamente un minuto después de hacerlas. De ahí surgió la empresa Polaroid en 1938 y justo diez años después se lanzó al mercado la primera cámara instantánea.
Por supuesto aquella película original poco o nada tenía que ver con la actual. La película que se utiliza hoy se denomina “película integral” y se introdujo en el mercado en 1972. Esta película contiene todas las capas químicas necesarias para la exposición, el desarrollo y la fijación de una fotografía, incluso a plena luz del día.
La Polaroid contiene una serie de capas que incluyen componentes sensibles a la luz y elementos químicos. La parte ancha del marco blanco, la de la parte inferior, guarda a buen recaudo una pequeña cantidad de reactivo que se libera tras hacer la foto. Pero antes hay que presionar el botón del obturador para que las capas sensibles a la luz se expongan. Acto seguido la hoja de la película sale del frente de la cámara pasando a través de dos rodillos que abren la vaina que contiene el reactivo y lo distribuyen uniformemente entre las capas sensibles a la luz y la capa de la imagen capturada.
El reactivo reacciona (valga la redundancia) con los otros productos químicos produciendo varios procesos diferentes a la vez. Uno revela la imagen, otro la mantiene a salvo de la luz y otro es una reacción con una capa de ácido que convierte algunas capas que en origen son opacas en transparentes para que la imagen pueda ser finalmente visualizada.
'Instant Dreams'
Otra iniciativa relacionada con la fotografía instantánea y Polaroid es ‘Instant Dreams’, una película de Willem Baptist que versa sobre la fascinación y el amor por este tipo de fotografías instantáneas.
Se trata de una película coral en la que un grupo de "individuos estrafalarios" están conectados a las Polaroid de una manera especial: una artista que hace una sesión fotográfica en el desierto de California con sus últimas existencias de película Polaroid; un editor de una importante revista noeyorquina, autor de un libro sobre la historia de Polaroid, que intenta retratar su relación con su hijo con su cámara instantánea; una chica japonesa que descubre por primera vez la magia de Polaroid en Tokio… Por si os parece interesante, os dejamos con un trailer de la película:
Más información | Magazine Polaroid Originals
Foto de portada | Marc Mueller