Palabra de GfK. Esta conocida consultora ha publicado recientemente uno de sus habituales análisis del mercado de la fotografía, y lo cierto es que no tiene desperdicio. Todos sabemos que la mayor parte de las empresas que se dedican a la fotografía no están viviendo su mejor momento, pero este estudio demuestra que algunos segmentos del mercado tienen por delante un futuro prometedor, mientras que otros están cayendo de una forma muy clara.
Una de las conclusiones más interesantes que podemos extraer después de leer con calma el informe de GfK es que las cámaras compactas del segmento de entrada se están llevando un buen varapalo, mientras que las premium, sean DSLR, CSC o con óptica fija, están aguantando el tirón bastante bien. Veámoslo con más calma.
Las CSC crecen más que las DSLR
Esta gráfica pone de manifiesto algo que todos intuimos: el mercado fotográfico se está contrayendo. En 2013 se vendieron muchas menos cámaras que en el período que se extiende entre 2009 y 2012. El segmento que más ha caído, aunque sigue siendo el que más vende, es el de las compactas. La venta de cámaras DSLR apenas ha variado durante los dos últimos años, mientras que la de cámaras CSC no ha dejado de incrementarse desde 2010, aunque es un crecimiento tímido. Aun así, todavía se venden más DSLR que sin espejo.
En Europa mandan las sin espejo
Esta segunda gráfica compara la venta de cámaras durante los meses de enero y febrero de 2013 y 2014. Las cámaras con óptica fija han caído en todas las regiones claramente, rozando un descenso cercano al 50% en China, Oriente Medio, África e Iberoamérica. Las DSLR también han caído en todos los mercados excepto en uno, Japón, en el que han crecido nada menos que un 30%. Y las CSC crecen con fuerza en Oriente Medio, Japón, África e Iberoamérica. En Europa también arrojan un resultado positivo; de hecho, son las únicas cámaras que crecen en nuestro continente.
Mejor una cámara que un móvil
Esta última gráfica arroja un dato muy interesante: en general, a pesar de la creciente popularidad de los smartphones, los usuarios seguimos prefiriendo utilizar mayoritariamente cámaras para tomar nuestras fotos. Los teléfonos solo se imponen con claridad en dos escenarios: las instantáneas derivadas de «escapadas nocturnas» y las fotos ocasionales. Un resultado lógico. En las demás circunstancias, seguimos confiando en las cámaras fotográficas.
Vía | Photoscala
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