Dicen que a algunas personas, la fama o el reconocimiento de sus mérito les llega todo de golpe... pero a veces tarde. Uno de estos casos ha sido en parte a William Eggleston, uno de los verdaderos maestros del color en la fotografía, que fue criticado y banalizado allá por mediados de los 70 cuando realizó su primera exposición en el MoMa de Nueva York.
Ahora, y tras ser inspiración para múltiples personalidades del cine como Sofia Coppola o David Lynch, y de nuevos fotógrafos desde Juergen Teller hasta Andreas Gursky, parece que es cuando se le empieza a rendir pleitesía a uno de los grandes fotógrafos de la historia. En este caso va a ser con el premio a la mejor Mejor Contribución Fotográfica que formará parte de los Sony World Photography Awards que se celebrarán en Londres el día 25 de este mes, en los que estaremos presentes este año por primera vez.
Recordar que, William Eggleston, es un fotógrafo norteamericano que comenzó su carrera fotográfica a mediados de los años 60 y que, con su técnica fotográfica de saturación de colores y composiciones estrambóticas revolucionó lo que se conocía hasta la fecha. Todo ello, fue lo que le motivaron gran número de críticas en su primera aparición importante en el MoMa. A día de hoy su obra, de corte documental con una visión diferente e interior, se ha revalorizado muchísimo, llegando a pagarse grandes sumas de dinero por ella.
William Eggleston tiene una colección de fotografías en la Colección permanente de fotografía en el MoMa de New York, para todos aquellos que queráis echarle un vistazo si os pasais por la Gran Manzana y visitais el Museo de Arte Contemporáneo.