Buena parte de los fotógrafos profesionales que conozco utiliza en su día a día una bolsa para material fotográfico de tipo «bandolera», pero lo cierto es que en algunos escenarios de uso resulta más práctica una mochila. En fotografía de naturaleza, viajes o en cualquier otra situación en la que nos veamos sometidos a movimientos bruscos y queramos que nuestro equipo vaya bien fijado a nuestro cuerpo, una mochila es la mejor solución.
Os cuento todo esto porque el fabricante italiano Manfrotto ha añadido a su catálogo de bolsas para material fotográfico una nueva mochila que, en principio, tiene muy buena pinta. Es el modelo Travel Backpad, y tiene dos características interesantes: permite transportar un trípode BeFree y tiene un compartimento dedicado en el que podemos colocar un ordenador portátil de 13 pulgadas.
Sus demás características son las habituales en las bolsas para material fotográfico de Manfrotto. Utiliza tejido de nailon de alta densidad; ofrece espacio para transportar dos cámaras y, al menos, otros tantos objetivos; tiene compartimentos internos para almacenar las baterías, las tarjetas de memoria y otros accesorios, etc. Lo habitual.
Aún no he tenido la ocasión de ver «en vivo» esta mochila, pero conozco los productos de esta marca, y, sinceramente, suelen tener muy buena calidad. Este modelo en particular tiene un precio de 165 dólares (unos 122 euros).
Más información | Manfrotto
En Xataka Foto | Manfrotto ha actualizado sus trípodes de las series 190 y 055
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juanmcm
Estas mochilas de Manfrotto me parecen soberbias, por diseño, acabados y en ocasiones puntuales un precio también atractivo.
Lo único que no me atrae en exceso es la abertura lateral, que en según que entornos puede ser algo arriesgado y máxime teniendo en cuenta que anteriormente tuvo bolsas y mochilas cuya cremallera estaba del lado de la espalda para evitar sustos y sorpresas desagradables.
Me parece atractivo que haya varias mochilas que cubran multitud de necesidades y rangos de precios, pero deberían acomodarlas bien en su oferta pues parece que algunas se pisan un poco y eso al consumidor puede confundir un poco.
Lo malo de Manfrotto es que hay ocasiones que los productos no tienen bien definido el target y no se sabe bien que modelo conviene, ya sea mochilas, trípodes y demás.
Luego, mencionar que el nombre es backpack, no como figura en el reportaje.