Dmitry Morozov es una de esas personas a las que les sobra imaginación. Esto es lo único que puede explicar que a este artista ruso se le haya ocurrido construir su propia cámara instantánea de 8 bits combinando cuatro elementos que a los demás bien pueden parecernos irreconciliables.
Y es que ha logrado ponerla a punto usando una consola de videojuegos portátil Game Boy, la clásica máquina de Nintendo; una pistola, una placa Arduino (es una plataforma de hardware libre con un microcontrolador y su propio entorno de desarrollo) y una impresora térmica. Es evidente que su «invento» no pasará a la posteridad por su calidad, pero sí, quizás, por su originalidad. Y si no os lo creéis no os perdáis el breve vídeo que os dejo al final del post (eso sí, os prevengo de que la música «ratonera» que suena es realmente terrible).
Para utilizar la cámara lo único que su creador hace es apuntar con la pistola en la dirección en la que está el objeto o el sujeto que quiere fotografiar, y disparar. La imagen es capturada, visualizada en la pantalla de la Game Boy e impresa en la impresora térmica. Su calidad, como podéis ver en el vídeo, deja mucho que desear, pero lo interesante de este proyecto no es el acabado final de las fotografías, sino darnos cuenta de que realmente podemos llevar a cabo proyectos imaginativos y muy originales con pocos recursos. Solo hace falta ponerle ganas.
Vía | PetaPixel
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