Fotografiar animales salvajes es una disciplina muy exigente, que requiere de una importante preparación y mucha paciencia. Pero si encima son retratos muy cercanos de especies tan peligrosas (y esquivas) como leones o gorilas, la cosa tiene más mérito. Sobre todo si nos dicen que no se ha utilizado ningún teleobjetivo, como hizo Graeme Purdy para captar las imágenes de ‘Eight Feet’.
El nombre (que se traduciría algo así como “A dos metros y medio”) ya sugiere esa cercanía que este fotógrafo profesional especializado en vida silvestre logró gracias al uso de una especie de coche todoterreno a radiocontrol sobre el que iba montada la cámara y que él controlaba a distancia. De esa forma consiguió acercarse a los animales lo suficiente, aunque para nada fue un proceso fácil (lo podéis ver en un vídeo al final).
De hecho, tanto el coche como la cámara sufrieron varios percances, ya que no era fácil que los animales se sintieran cómodos antes la extraña presencia. Sin embargo, gracias a su paciencia (18 meses le llevó el proyecto) consiguió que fueran cogiendo confianza y el resultado son unos retratos muy íntimos de algunos de los animales más peligrosos del mundo.
Las fotos se han volcado en un fotolibro homónimo que incluye 30 retratos de elefantes, búfalos, gorilas, leones y leopardos, “una visión única e íntima de las vidas de algunos de nuestros mamíferos más icónicos” cuenta el autor. Y es que, para este fotógrafo irlandés, “estar tan cerca de cada uno de los animales fue emocionante, pero me mantuve profundamente respetuoso con ellos en todo momento”.
Por supuesto, Purdy es un defensor del bienestar y la conservación de los animales. De hecho, los beneficios conseguidos por el libro (que se puede comprar desde este enlace) van destinados a National Park Rescue, una organización benéfica que ayuda a proteger la vida silvestre africana.
Graeme Purdy | Página web | Instagram
Fotografías de Graeme Purdy reproducidas con permiso del autor para este artículo
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